El portavoz del Grupo Parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha confiado en que Novagalicia Banco pueda cubrir las necesidades marcadas por el nuevo real decreto aprobado el pasado viernes en el Consejo de Ministros, tal y como comunicó la entidad bancaria a la Comisión Nacional del Mercado de Valores el pasado sábado. En este sentido, ha hecho "votos" por que NCG no llegue a ser subastada.

"Yo no descarto nada, pero hago votos para que se cumpla" el proyecto de esta entidad, ha manifestado en rueda de prensa el dirigente popular en referencia a los planes de la entidad que preside José María Castellano.

Novagalicia Banco informó a la CNMV que los cálculos preliminares de las provisiones adicionales suman 1.109 millones de euros, lo cual provocará que los resultados del ejercicio 2011 se reduzcan en 776 millones de euros.

Así las cosas, el portavoz del grupo mayoritario en la Cámara gallega ha confiado en que se puedan cumplir los planes de la entidad, puesto que el proyecto de esta entidad está "vinculado a Galicia", si bien también ha remarcado que la Comunidad Autónoma no tiene competencias sobre ella, puesto que ya no se trata de una caja.

Con todo, sobre este extremo, Pedro Puy ha subrayado que aunque las "competencias muden", ello no significa que la Xunta "se desentienda" de la entidad bancaria, resultante de la fusión de Novacaixagalicia y Caixa Galicia.

Además, ha explicado que esta entidad, cuyo capital mayoritario pertenece al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), "no está sujeta" a las condiciones de la venta inmobiliaria, que reduce de cinco a tres años el tiempo para deshacerse de este 'stock'.

Aborda "por fin" el mercado inmobiliario

El portavoz del Grupo Popular en el hemiciclo gallego ha destacado que el decreto que ha aprobado el Gobierno central aborda "de una vez, por fin, el principal problema que existe en el sistema financiero", tal y como es la existencia de activos que perdieron "muchísimo valor" como consecuencia de la crisis, el mercado inmobiliario.

Con todo, ha lamentado que esta reforma llega "en un momento tardío" —al no abordarse ya cuando gobernaba el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero—, y que tenía que haber sido "atajado mucho antes"; así como en una situación económica complicada en todo el país.