La nueva flota de vehículos eléctricos del Hospital de Cruces recorre más de 2.900 kilómetros al mes en sus desplazamientos para realizar hospitalizaciones domiciliarias, con una media de 470 kilómetros diarios y mediante el único uso de sus baterías como fuente de energía.

Según ha informado el Ente Vasco de la Energía (EVE), el Hospital de Cruces es "un referente" en materia de energía, ya que su flota de vehículos eléctricos es pionera tanto en el ámbito público como en el sanitario.

El centro hospitalario dispone de seis vehículos eléctricos, cinco de ellos utilitarios, de las marcas Peugeot Ion y Think, y furgoneta Mercedes Vito E-Cell. Con este equipamiento, sustituyó la flota de vehículos que utilizaban gasolina y gasóleo convencional para realizar las labores de atención a pacientes dentro del servicio asistencial sanitario y de reparto de medicinas a domicilio.

El cambio ha permitido, según el EVE, suministrar "la misma atención" con "una notable reducción de impactos derivados del transporte hasta los domicilios de los pacientes", ya que los vehículos de motorización eléctrica "son mucho más eficientes, no tienen emisiones locales y no generan ruidos".

Cruces cuenta también con seis puntos de recarga instalados por IBIL, empresa gestora de la carga del vehículo eléctrico, participada al 50 por el Gobierno vasco, a través del EVE, y Repsol, que permiten gestionar íntegramente las recargas diarias de cada uno de los vehículos.

La monitorización de los vehículos realizada durante el mes de marzo refleja que los vehículos han recorrido en su servicio un total de más de 2.802 kilómetros, con una media diaria por vehículo de 467 kilómetros. Para el EVE, estos datos constatan que los vehículos eléctricos "igualan el servicio prestado anteriormente con vehículos mucho más contaminantes, con una mejora sustancial de las prestaciones en eficiencia y energía de los vehículos, pero también con mejoras para el entorno y el medio ambiente".

INTRODUCCIÓN

El proyecto para la electrificación del transporte en Euskadi y la introducción del vehículo eléctrico puesto en marcha por el Gobierno Vasco pretende "crear una masa crítica de vehículos en circulación que impulse el mercado" y logre, reducir el consumo de carburantes fósiles en la automoción.

Para ello, IBIL despliega, en la actualidad, una red de recarga del vehículo eléctrico que permita, en carretera, abastecer de a todos los usuarios. También pretende cerrar acuerdos con diferentes entidades públicas y privadas, para que "paulatinamente introduzcan este tipo de vehículos en sus flotas y sustituyan los vehículos con motorización convencional de gasóleo o gasolina por otros eléctricos, más eficientes y con menor consumo de energía".