El conseller catalán de Interior, Felip Puig, ha recordado este lunes que son los alcaldes los que adoptan la decisión sobre si permiten a los indignados volver a protagonizar acampadas para celebrar el primer aniversario del 15-M, aunque ha advertido de que no se pueden convertir las plazas en "campings privados".

En una entrevista a Ràdio-4, Puig ha señalado que si los indignados celebran el primer aniversario de las acampadas del 15-M de forma pacífica, sin coacciones y sin agresiones, "no habrá ningún problema". En cualquier caso, ha recordado que son los alcaldes los que tienen la competencia de regular la ocupación de los espacios públicos, ya que los Mossos d'Esquadra sólo deben actuar si hay desórdenes públicos.

Puig ha avalado que pueda haber una acampada "un día o unos cuantos días", si se garantiza que quien se quiera manifestar lo haga y que "quien quiera pasear o dar comida a las palomas lo pueda hacer". No obstante, ha advertido de que lo que no puede ser es que se conviertan las plazas en "campings privados".

En la entrevista, Puig también ha defendido que algunos mossos de paisano acudan a manifestaciones en grupo y con un brazalete identificativo, ya que cree que se ha demostrado un fenómeno "muy importante" para disuadir incidentes, como ocurrió con la manifestación anticapistalista del 1 de mayo por la tarde. Asimismo, ha rechazado que los mossos infiltrados sean los que originen los disturbios, lo que considera una calumnia difundida desde determinados grupos que amparan la violencia callejera.

Además, ha remarcado el buen funcionamiento de la web de delación activada por Interior para que los ciudadanos les ayuden a identificar a supuestos autores de violencia callejera durante la huelga del 29-M y ha apuntado que si entre los sospechosos figura algún menor "no pasa nada, se retira inmediatamente".

Por otra parte, Puig se ha referido al dispositivo de seguridad con motivo de la reunión del Banco Central Europeo (BCE) en Barcelona y ha admitido que habría sido mejor que hubiera un único centro de coordinación y que en un principio el Ministerio del Interior intentó que la Policía Nacional y la Guardia Civil asumiera competencias que son exclusivas de los Mossos d'Esquadra, aunque finalmente no lo lograron.