Las Cortes de Aragón han recordado este viernes, 4 de mayo, al jurista y político Manuel Giménez Abad, asesinado por la banda terrorista ETA en un atentado que tuvo lugar el 6 de mayo de 2001. Uno de sus hijos, Manuel Giménez Larraz, ha afirmado que la banda armada "languidece" y ha animado a mantener la presión policial y judicial sobre los asesinos.

Giménez Larraz ha intervenido en un acto de homenaje a su padre celebrado en el Salón San Jorge del Palacio de La Aljafería, sede del Parlamento aragonés, donde ha recordado que "ETA sigue armada" y ha expresado que el Estado no puede negociar condiciones políticas con grupos que carecen de representatividad legislativa.

Si el Estado negocia condiciones políticas "se corre el riesgo de que cualquier otra medida unilateral, incluso las de carácter estrictamente penitenciario, puedan verse como un acto basado en el miedo", ha considerado Giménez Larraz.

El hijo del político asesinado ha señalado que la banda armada siente "desprecio" por la vida humana. Manuel Giménez Abad defendía los valores democráticos de la sociedad, que están recogidos en la Constitución, como son la libertad, la igualdad y el pluralismo político, que son "los que más detestan los asesinos de ETA", a lo que ha añadido que "mi padre y más de 1.000 víctimas murieron defendiendo los valores fundamentales de la democracia".

Manuel Giménez Larraz ha indicado que la "agonía" de la banda "no es el resultado de su espontánea voluntad", sino que "se debe al firme pulso que los demócratas hemos mantenido durante décadas".

"Nunca hemos abdicado de nuestras convicciones democráticas y hemos sido escrupulosos con el Estado de Derecho", ha continuado.

Giménez Larraz ha mencionado el Acuerdo por las Libertades y Contra el Terrorismo, firmado en 2000, en el que se trazó "una estrategia política sin complejos" y "la voluntad de acabar con una de las principales amenazas de nuestra sociedad", el terrorismo.

Ese fue "el momento de actuar como lo hacen las democracias más estables del mundo". Ahora la banda terrorista es "un arcaico vestigio del pasado", ha dicho Giménez Larraz, quien ha apuntado que los ciudadanos "no permitirán que retome su actividad criminal".

Los asesinos de ETA "siguen libres", ha comentado el interviniente, quien ha dicho sentir "temor" por la posible relajación de la presión policial y judicial.

Manuel Giménez Larraz ha dicho sentirse orgulloso por el apoyo que ha recibido la familia "desde el primer momento". Ha recordado que Aragón era una de las pasiones de su padre.

También ha defendido la labor de la Fundación Giménez Abad, que transmite a los alumnos que siguen sus cursos los valores de libertad e igualdad, que "deben ser las reglas del juego democrático".

Ha hablado de su hija, Candela, que "no podrá conocer a su abuelo". Esta niña "crecerá respetando los valores democráticos por los que mi padre y cientos de españoles fueron cobardemente asesinados". "COMPROMETIDO"

Ha introducido el acto el presidente de las Cortes de Aragón, José Ángel Biel, quien ha rendido homenaje a Giménez Abad, "ilustre jurista, político comprometido y amigo". Ha destacado la labor de la Fundación Manuel Giménez Abad, consolidada durante estos 11 años de andadura.

En el acto ha intervenido el catedrático de Historia Antigua de la Universidad de Zaragoza Guillermo Fatás, quien ha recordado que trató con Giménez Abad durante 20 años. Cuando le conoció, en 1981, vio en él a un hombre "simpático y circunspecto a la vez".

Fatás ha resaltado de Giménez Abad la inteligencia y la preparación jurídica, así como su bonhomía. También ha dicho que quienes ocupaban puestos por encima suyo tenían mucha confianza en su persona.

Guillermo Fatás ha recordado su última entrevista con Giménez Abad, el 27 de abril de 2001, el año en el que también fueron asesinados dos guardias civiles en Sallent de Gállego y, en Barcelona, el exministro Ernest Lluch.

El presidente del PP aragonés acudió al despacho de Fatás en Heraldo de Aragón, diario que dirigía, acompañado por el dirigente del PP vasco Carlos Iturgaiz. Hablaron sobre política hidráulica, los problemas del Gobierno autonómico y la banda terrorista ETA.

"A medida que cumplo años me cuesta más sobreponerme a las emociones y además hago menos esfuerzo para sujetarlas y siento, cuando recuerdo a los muertos del terrorismo etarra, resentimiento en la medida en que eso linda con el rencor", ha dicho Fatás.

Fatás ha recordado los monumentos dedicados a Manuel Giménez Abad, entre otros un puente que une las dos orillas del Ebro en Zaragoza, y ha mencionado la manifestación contra ETA que tuvo lugar tras el asesinato, "donde hubo cientos de miles de personas".

A esto ha añadido que "no consentimos ni que se olvide el asesinato ni la fecundidad de su vida". Guillermo Fatás ha afirmado que "de la muerte de Manuel los re-sentidos tenemos que sacar fuerzas para seguir luchando por la libertad".

Por su parte, el secretario general del Congreso de los Diputados, Manuel Alba, ha destacado de Giménez Abad su valía, su capacidad y su gran condición humana.

Ha indicado que su muerte fue "trágica, injusta e inexplicable" y que "ha dejado una huella absolutamente indeleble", en lo personal y por la creación, en 2002, de la Fundación que lleva su nombre.

La aportación de la Fundación es "absolutamente insustituible" tanto en Aragón como en el ámbito nacional, ha continuado Manuel Alba. El éxito es "rotundo", ha señalado.

La labor de la Fundación ha reforzado la democracia, ha potenciado las prácticas de buen gobierno y ha supuesto "una aportación valiosísima a la imagen de Aragón", ha señalado Alba.

El magistrado del Tribunal Constitucional, Luis Ortega, ha dicho que la Fundación "representa el impulso y el rechazo de la sociedad aragonesa a esa actuación violenta en la persona de Manuel Giménez Abad".

Además, Ortega ha destacado el éxito del modelo autonómico. "Con naturalidad España transitó sin ningún problema a su descentralización política", ha continuado el magistrado.

Ahora "falta un nuevo acuerdo sobre las reglas del funcionamiento operativo del modelo ya implantado y esas reglas son las que probablemente serían necesarias para clarificar el modelo".

El presidente de la Cámara de Representantes de Uruguay, Jorge Rico, ha expresado que "la libertad es la ideología que nos une a todos los que estamos acá" y que "sin Parlamento no hay democracia".

Rico ha destacado la labor realizada por la Fundación en Uruguay, donde impulsa una escuela de buen gobierno en la que se forman jóvenes cuadros de los distintos partidos políticos. PREMIOS

Durante el acto se ha entregado a Asier Blas Mendoza el X Premio Manuel Giménez Abad por un trabajo sobre los "Modelos de democracia en las comunidades autónomas españolas".

Asimismo, la Fundación Giménez Abad ha reconocido el trabajo realizado por Rodrigo Rodríguez Silveira sobre el Estado del Bienestar en Brasil.