El alcalde de Cuenca, Juan Ávila, ha asegurado que el rechazo del plan de ajuste del Consistorio conquense por parte del Ministerio de Hacienda se debe al incumplimiento del anterior plan de saneamiento, elaborado por el anterior Gobierno 'popular'.

Así lo ha explicado Ávila en rueda de prensa después de que el Ministerio no aceptara el plan de ajuste presentado por no recoger ingresos suficientes para financiar los gastos corrientes ni la amortización de la deuda y las previsiones de ingresos del documento no se corresponden con la evolución de los mismos de 2009 a 2011.

El primer edil ha asegurado que a pesar de este rechazo los 632 proveedores con facturas pendientes del Ayuntamiento cobrarán las deudas, que según el plan de ajuste presentado ascendían a 22,3 millones de euros.

Ávila se manifestaba así tras conocer que el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha rechazado el plan de ajuste presentado por el Ayuntamiento conquense que recogía las obligaciones del Consistorio para hacer frente al mecanismo de pago a proveedores.

En este punto, Juan Ávila, ha señalado que está "la madre del cordero", y ha considerado que Hacienda penaliza ahora al Ayuntamiento de Cuenca "por no haber cumplido con el plan de ajuste puesto en marcha por la anterior corporación 'popular'".

"Cuando se elabora un plan de ajuste como el del año 2009 y no se cumple, uno como institución no puede esperar que eso genere confianza sino todo lo contrario", ha señalado. Además, a juicio del alcalde, de haberse cumplido aquel plan de saneamiento no hubiera hecho falta acogerse a este nuevo mecanismo para pagar a proveedores.

La anterior corporación solicitó un crédito de 13,5 millones de euros para pagar a proveedores que supuso la puesta en marcha de un plan de saneamiento que preveía un superávit de 1,9 millones de euros en 2009, año en el que las cuentas arrojaron un déficit de 7,3 millones; en 2010 auguraba un superávit de 2,8 millones pero el déficit ascendió a 13,5 millones y en 2011 el documento preveía un superávit de 5,3 millones que no se obtuvo, sino que se alcanzó un déficit de 20 millones.

Incremento de la presión fiscal

Por otra parte, el alcalde ha lamentado que Hacienda considere que el documento no recoge ingresos corrientes suficientes para financiar sus gastos y la amortización del endeudamiento a pesar de que a finales de 2011, el consistorio conquense incrementó de forma "muy importante" la presión fiscal sobre los ciudadanos.

"Da la sensación de que al Ministerio no le parece suficiente que a partir del 1 de enero el IBI en Cuenca haya crecido un 39 por ciento; tampoco parece que sea suficiente que la subida del impuesto de vehículos de tracción mecánica haya sido del 16% en los más pequeños y del 33% de los más grandes; y le ha parecido insuficiente que la basura, ya este año, haya subido un 22%. "Las tasas ya han subido bastante y no hay margen de maniobra".

Ávila espera que, al igual que ha ocurrido con algunas Comunidades Autónomas, el Gobierno permita al consistorio conquense presentar alegaciones a la decisión ministerial, corregir las deficiencias que se hayan detectado o incluso presentar un nuevo plan de ajuste.

Asimismo, ha defendido el plan de ajuste presentado que preveía ingresar 539 millones de euros frente a unos gastos de 517 millones, lo que supondría un ahorro de 22 millones de euros en diez años. Confía en poder explicar los términos del documento al Gobierno central para lo que ha solicitado una reunión urgente con el Secretario de Coordinación Autonómica y Local.

Se pagará a proveedores

Con todo, Juan Ávila ha garantizado que los proveedores cobrarán las facturas que el Consistorio tiene pendientes porque así lo establece el Real Decreto, y ha reconocido que desconoce cómo podrá abonar las facturas adscritas a la línea de crédito aunque ha apuntado a la posibilidad de sufragarlas a través de la participación del Ayuntamiento de Cuenca en los tributos del Estado.