El sindicato CSIF-A conmemora este martes el Primero de mayo, Fiesta del Trabajo, con la emisión de un manifiesto en el que "exige, sin paliativos, una reforma laboral negociada entre el ámbito político y el sindical para poder combatir, de una vez por todas, el elevado paro que asola España en general y Andalucía en particular".

En una nota, CSIF-A considera que se celebra el Día del Trabajo "con un sabor agridulce por la situación del país, aunque repleto de reivindicaciones, de exigencias y peticiones como uno de los sindicatos más representativos de la sociedad española".

La central indica que "en estos momentos de profunda crisis económica, asume su responsabilidad y se ejecutarán con la mano más firme, el mejor de los propósitos y el mayor de los esfuerzos, para conseguir que no sean los trabajadores los que paguen las consecuencias de una crisis que no han originado".

En este sentido, para CSIF-A estamos ante "una reforma laboral que no aliviará las cifras de desempleados que mes tras mes, engrosan las colas ante las oficinas de empleo de todo el territorio español y que no servirá para aliviar ni mejorar las economías familiares, verdaderas damnificadas por la situación actual, culpa y consecuencia de la mala gestión de nuestros gobernantes".

Lamenta que "tampoco en el ámbito público aporta soluciones reales y considera que la posibilidad de despedir al personal laboral por motivos presupuestarios "propiciará que decaigan la cantidad y la calidad de los servicios públicos que se prestan a los ciudadanos y hará que la Administración Pública quede más en manos de los políticos, los mismos que han derrochado en gastos superfluos con infraestructuras ruinosas, coches oficiales y administraciones paralelas y clientelistas sin control".

Para CSIF-A "no es asumible esta reforma laboral y estamos trabajando sin buscar el protagonismo, ni la foto fácil, ni el rédito electoral propio, o de algún partido político afín, con todos los grupos políticos en mejorar con las enmiendas presentadas al texto final".

Asimismo, el sindicato advierte de que "garantizar los derechos de los trabajadores y la imposibilidad de despido de laborales son irrenunciables en estos momentos" y ha advertido de que "de no aceptarse en el trámite parlamentario nuestras propuestas pasaremos a la acción en toda su extensión, no descartando movilizaciones y la huelga".

En este sentido, CSIF-A entiende que "ahora más que nunca es necesaria la negociación política y sindical, es hora de que todos participemos en conseguir una reforma laboral negociada que nos permita establecer las nuevas reglas que regularan el mercado laboral de nuestro país".