La Consejería de Agricultura ha adaptado la frecuencia de los chequeos y el número de animales a chequear, adaptándola a la situación sanitaria de la ganadería de la región, en virtud de los indicadores de prevalencia de la cabaña ganadera.

Todo ello mejorará los índices económicos y productivos de las explotaciones, reducirá los gastos que conlleva el manejo de los animales y las actuaciones veterinarias, y con ello, contribuirá a posicionar la imagen de la sanidad ganadera de la región entre las mejores de España y Europa, facilitando las transacciones comerciales internacionales, según ha informado la Junta en nota de prensa.

De esta forma, se ha clasificado la región en Zonas de Alta o Baja Prevalencia y, en función de éstas, se adaptarán las actuaciones veterinarias para el año 2012.

Esta medida se aplica por la evolución favorable de los indicadores epidemiológicos durante el último año frente a las enfermedades que contempla el programa nacional de erradicación en Castilla-La Mancha, que son la brucelosis bovina, cuya prevalencia se ha reducido en 2011 un 68 por ciento respecto a 2010; la brucelosis ovina/caprina, que se ha reducido en un 50 por ciento en 2011 respecto a 2010; y la tuberculosis bovina, cuya reducción ha sido del 25 por ciento en 2011 respecto a la prevalencia de 2010. Incidencias que, en muchos casos, están por debajo de la media de las comunidades autónomas.

Por otra parte, y teniendo en cuenta la mejora de la situación sanitaria de la cabaña ganadera de ovino/caprino en la región, se ha suspendido la vacunación frente a brucella mellitensis en la totalidad de la provincia Albacete, Cuenca y Guadalajara y en un alto numero de comarcas de las provincias de Ciudad Real y Toledo.