Una pala excavadora ha procedido este viernes al derribo de las últimas chabolas existentes en el asentamiento de Penamoa, que desaparece tras 28 años de existencia en los que han sido numerosas las denuncias vecinales y las actuaciones policiales en relación con el tráfico de drogas en la zona.

No obstante, miembros de la Plataforma Ventorrillo Desmantelamiento de Penamoa han denunciado la existencia de otros asentamientos próximos al lugar "pequeños y dispersos" y han exigido a las autoridades que adopten medidas al respecto.

El derribo de la primera de las seis chabolas que todavía existían en el poblado comenzó sobre las 10.00 horas con la presencia de un dispositivo policial, integrado por miembros del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local, en cumplimiento de una orden judicial.

El dispositivo se ha desarrollado sin incidentes, con excepción de un momento de tensión entre algunas personas de etnia gitana y miembros de la Plataforma Ventorrillo Desmantelamiento de Penamoa cuando estos intentaron acceder a la zona y a los que los primeros tildaron de "racistas".

Finalmente, la Policía Nacional optó por desplazar a este grupo de vecinos, con camisetas en los que se podía leer "No a un Penamoa 2", a una zona más alejada del lugar donde se estaba produciendo al derribo de las chabolas. Solo la primera, hecha de chapas metálicas y ladrillo, tardó más de media hora en demolerse.

Mientras se desarrollaban estos trabajos, algunos exchabolistas presenciaban del derribo, mientras que otros recogían material de las chabolas y chatarra. Sin embargo, fueron pocos los que se desplazaron al lugar.

Plan de integracion

La mayoría de las familias que residían en el asentamiento se acogieron, en su día, al Plan de Inserción promovido por el Ayuntamiento de A Coruña en 2007. Quedaron excluidos del mismo aquellas familias que tenían antecedentes por tráfico de drogas. Posteriores órdenes judiciales permitieron el desalojo y derribo de las chabolas existentes, que llegaron a alcanzar la cifra del centenar.

La desaparición del asentamiento coincide con la ocupación por parte de exchabolistas de Penamoa de un edificio en la zona de A Moura, próxima al asentamiento, y donde se está a la espera también de una orden judicial para su desalojo.

Denuncias vecinales

Por otra parte, la presidenta de la Plataforma Ventorrillo Desmantelamiento Penamoa, Ana Oreiro, una de las participantes en la protesta convocada por los vecinos coincidiendo con el derribo de chabolas, ha denunciado la aparición de varios asentamietnos "pequeños y dispersos" próximos al lugar.

En concreto, ha señalado que uno de ellos se sitúa en la zona conocida como Agra das Baxadoiras y ha trasladado la preocupación de los vecinos por lo que ha calificado como "un problema de seguridad ciudadana y de salud pública".

Además, ha pedido a las autoridades que impidan que se genere "un Penamoa 2", en referencia al tráfico de drogas en esta zona, y ha añadido que en este caso están ocupando casas deshabitadas o viviendo en tiendas de campaña.

Por otra parte, han denunciado ser víctimas de amenazas y han reclamado a las autoridades que pongan fin a una situación "que llevamos 30 años padeciendo", ha apostillado.