La Autoridad Portuaria de Las Palmas está trabajando para intentar llegar a una solución con los estibadores y estos pongan fin al desbloqueo que están realizando a contenedores de ayuda humanitaria con destino a la urgente hambruna del Sahel.

Actualmente, hay 50 contenedores con sorgo ensacado de la United States Agency for International Development (USAID) al Programa Mundial de Alimentos que se encuentran "paralizados y no pueden ser embarcados" en la terminal de contenedores de Opcsa en un buque portacontenedores con destino al puerto de Duala (Camerún), según ha informado la Autoridad Portuaria en nota de prensa.

Esta ayuda humanitaria arribó la pasada semana al Puerto de La Luz, a bordo del buque Sheila McDevitt (bandera norteamericana), que descargó en los silos del Muelle Grande 15.000 toneladas de sorgo (de las 33.000 que transporta el buque) con destino al puerto de Duala, en Camerún.

Así, del total de las 15.000 toneladas descargadas, 7.000 toneladas se han ensacado para enviar en 350 contenedores, de forma progresiva, al puerto de Duala y a través de los buques de línea regular. De estos, los primeros 50 contenedores prevén embarcarse esta semana y las 8.000 toneladas restantes ya han sido cargadas a granel con destino Duala, que representa el primer envío masivo de ayuda humanitaria de USAID/PMA para paliar la hambruna en el Sahel (Chad).

El problema deriva en que los estibadores mantienen un litigio por el no empleo de portuarios en los sistemas automatizados (operaciones exentas por ley de mano portuaria), que han trasladado de forma "inexplicable a la recogida y entrega de los contenedores con ayuda humanitaria con destino a Camerún".

Los estibadores exigen que el transporte de los contenedores "no lo realicen las empresas transportistas, como es habitual, sino estibadores", pero este hecho "no está contemplado" en la legislación vigente de los servicios portuarios.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, está mediando a fin de que "no fracase la primera experiencia" de utilizar el Puerto de Las Palmas como base internacional de ayuda humanitaria a África. Además, esta experiencia piloto está siendo seguida por las organizaciones humanitarias, por lo que un "resultado negativo podría dañar su continuidad y la imagen internacional del Puerto grancanario".