El Instituto Vasco de Consumo-Kontsumobide retiró uno de cada diez productos importados de las 256.000 unidades que mantuvo bajo su control en 2011. La "inmensa mayoría" de los productos rechazados eran juguetes, mientras que los que fueron retirados hasta la corrección de la deficiencia detectada representaron el 90 por ciento del total de unidades controladas.

Estas actuaciones, materializadas a través de la Unidad de Inspección y Control de Mercado de Kontsumobide, suponen un "considerable refuerzo de la vigilancia y control de los productos de importación", según ha afirmado el Instituto en un comunicado.

Del total de acciones llevadas a cabo en 2011 en Euskadi, un 77 por ciento correspondió a productos textiles, calzados y complementos, mientras que un 11 por ciento tuvo que ver con juegos y juguetes, otro 11 por ciento, con muebles, y el 1 por ciento restante, con material eléctrico.

La "inmensa mayoría" de los productos rechazados, es decir, destruidos o devueltos, fueron juguetes. Este apartado lo coparon las peonzas, seguidas de los peluches de pequeño tamaño, las armónicas y las flautas. El resto, más del 90 por ciento de las 256.000 unidades controladas, fue retirado hasta corregir la deficiencia advertida. OBJETIVOS

Uno de los objetivos de Kontsumobide es comprobar que los productos y servicios puestos a disposición de las personas consumidoras cumplen todos los requisitos de etiquetado, información y seguridad que exige la legislación vigente.

Asimismo, el Instituto se encarga de localizar, inmovilizar y, cuando es necesario, retirar los productos que puedan suponer un riesgo para la salud o la seguridad.

Esta labor preventiva se completó en 2011 con otra serie de acciones, como inspecciones a raíz de reclamaciones o campañas de inspección, fruto de las cuales se retiraron del mercado por razones de salud y seguridad un total de otras 20.173 unidades de 80 tipos de productos diferentes.