Caballito de Mar renace de sus cenizas. Tras la reurbanización del Balneario de las Arenas hace 6 años, hecho que provocó su cierre, la discoteca regresa con nueva ubicación y con fuerzas renovadas. El nuevo Caballito ha cambiado el mar por la montaña, y se ha trasladado a un entorno incomparable, una zona de antiguos campos de naranjos con más de 19.000 metros cuadrados, en cuyo centro se ubica una balsa, hoy reconvertida en una bella y refrescante laguna.Pero ahí no acaba todo. El local ha contado para su reapertura con un invitado de excepción: el bailarín Rafael Amargo, que zapateará sobre el escenario del lago junto al grupo Taiat Dansa, en una danza llena de burbujas.