Los comerciantes minoristas de Mallorca generaron en febrero un volumen de negocio de aproximadamente 199 millones de euros, lo que supone un incremento de las ventas del orden de 1 millón de euros respecto al mismo periodo de 2011, gracias a la mayor duración del mes analizado, si bien supone 19 millones de euros menos que el pasado mes de enero, cuando el volumen de negocio alcanzó los 218 millones de euros aproximadamente.

Así lo ha informado en un comunicado Pimeco, a partir de los datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que revelan que desde el 2008, no se producía un aumento de la cifra de negocio de los comerciantes minoristas de la isla durante el mes de febrero, en relación al mismo periodo del año anterior.

Concretamente, en 2008 obtuvieron un volumen de ventas de 242 millones de euros, frente a los 231 millones del ejercicio anterior, si bien desde entonces y hasta este año, decreció pasando a 208 millones en 2009; 200 millones en 2010 y 198 en 2011.

En lo que se refiere a la ocupación, el pequeño comercio de Baleares registró en el pasado mes de febrero un incremento de 0,4 puntos porcentuales frente al mismo periodo de 2011, y se situó a 1,37 por ciento por debajo de la ocupación media de los últimos 5 años.

Por otro lado, a nivel autonómico, con un arrastre anual en las ventas de -1,1 puntos porcentuales, Baleares ocupa el segundo lugar de Comunidades Autónomas con un decrecimiento anual inferior a la media española (-3,6 por ciento), siendo precedida por Castilla y León (-0,9) y seguida por País Vasco (-2,0) y Galicia (-2,1).

Pimeco ha señalado que estos datos confirman lo que viene reiterando mes tras mes desde que comenzó la crisis y que se caracteriza por una "contracción generalizada del consumo y, consecuentemente, la pérdida del volumen de negocio y las ventas".

"Los datos del mes de febrero son ligeramente mejores en su valor que los de 2011 y siguen la tendencia de los últimos años en cuanto a la evolución normal del ciclo comercial anual, aunque la muy ligera variación positiva estimada por el INE bien pudiera estar sesgada por el efecto calendario y, por ello, no tiene la entidad suficiente para esperar que ello signifique un signo consistente de la recuperación del consumo en Baleares", ha concluido la patronal del comercio.