Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal internacional asentada en Valencia presuntamente dedicada a la explotación sexual de mujeres que captaban en Brasil. Según ha informado la Jefatura Superior de Policía, han detenido a cuatro personas, dos mujeres de origen brasileño y dos hombres de origen español, por los presuntos delitos de trata de seres humanos para su explotación sexual, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y de los trabajadores y pertenencia a organización criminal.
Según las mismas fuentes, las víctimas contraían una deuda de entre 2.000 y 3.000 euros con la organización en concepto del viaje y, a su llegada, eran explotadas en un club de la ciudad de Valencia y tenían que pagar la mitad de sus servicios a la organización.
A mediados del pasado mes de diciembre, los policías tuvieron conocimiento de la existencia de una organización presuntamente dedicada a la explotación sexual de mujeres de origen brasileño y averiguaron que tenía personas en Brasil encargadas de localizar a posibles víctimas. Además, esas personas las acompañaban hasta que subían al avión, con destino España, para tenerlas controladas en todo momento y que no pudiesen huir, ya que habían invertido una cantidad de dinero en el viaje, y también les explicaban posibles incidencias que pudiesen tener en referencia a controles policiales.
Según las investigaciones, después de ser captadas en Brasil, las víctimas eran llevadas a España y contraían una deuda entre 2.000 y 3.000 euros en concepto del viaje, y después, eran explotadas sexualmente en un club de la ciudad de Valencia y tenían que pagar la mitad de sus servicios a la organización.
Esa organización estaba compuesta por cuatro personas de origen español y brasileño y cada una de ellas tenía una función, en concreto, una de las mujeres era la dueña de la casa de citas y la otra la encargada del establecimiento, mientras que uno de los hombres se encargaba de recoger el dinero recaudado en la casa y el otro de llevar algún tipo de sustancia cuando le fuera solicitado.
Los agentes detuvieron a esas cuatro personas por los presuntos delitos de trata de seres humanos para su explotación sexual, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, contra los derechos de los trabajadores y pertenencia a organización criminal.
Según las mismas fuentes, los detenidos cuentan con antecedentes policiales y dos de ellos pasaron a disposición judicial, mientras que los otros dos fueron puestos en libertad tras ser oídos en declaración y ser advertidos de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando para ello fuesen requeridos.
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