La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Pamplona ha dictado la apertura de juicio oral contra 13 imputados por los disturbios previos al chupinazo de los Sanfermines de 2010, en el que un joven madrileño resultó herido grave en la cabeza por el lanzamiento de una botella. El juicio se celebrará en la Audiencia de Navarra.

La juez decreta la libertad provisional sin fianza de los acusados con la obligación de comparecer ante los órganos judiciales cuantas veces sean llamados.

En cuanto a la responsabilidad civil, la juez impone a uno de los acusados una fianza de 350.000 euros para afrontar las responsabilidades que pudieran derivarse de las lesiones que sufrió el joven madrileño, con graves secuelas tras recibir el impacto de la botella. Se requiere la fianza también al Ayuntamiento de Pamplona en calidad de responsable civil subsidiario.

La titular del Juzgado de Instrucción también pide para 12 acusados una fianza de 2.000 euros por responsabilidad civil.

Los hechos tuvieron lugar poco antes del lanzamiento del chupinazo el 6 de julio de 2010, cuando un grupo de personas intentaron introducir una ikurriña de grandes dimensiones en la plaza Consistorial.

Un dispositivo de la Policía Municipal llegó al lugar para impedir la entrada de la ikurriña. Cuando se hicieron con la bandera y comenzaron a retirarse, varias personas les lanzaron botellas. Como consecuencia de estos hechos, varios agentes sufrieron lesiones y un joven madrileño sufrió un grave corte en la cabeza.