La consellera de Educación, Formación y Empleo, María José Catalá, ha manifestado que confía en poder publicar el próximo mes de julio el decreto de enseñanza plurilingüe para aplicarlo a partir de septiembre en el nivel de Infantil. Se hará, ha apostillado, "con un modelo que no rompe en absoluto con el que está actualmente en marcha, que tiene muy buenos resultados y que ha de continuar".

Así lo ha asegurado la titular de Educación a los medios tras la reunión que ha mantenido con representantes de Escola Valenciana para abordar cuestiones relativas a la enseñanza plurilingüe.

Catalá ha apuntado que, a partir de ahora, se van a desarrollar mesas sectoriales y de padres con el fin de tener listo el decreto para su puesta en marcha el próximo curso. En todo caso, ha subrayado que será una fórmula "que no rompe en absoluto" con la que está vigente y que lo que se persigue es dar participación activa real a los consejos escolares", ya que serán estos organismos los que decidan el grado de inmersión en inglés de cada centro.

Respecto al compromiso de mantener los programas de Enseñanza en Valenciano (PEV) e Inmersión Lingüística (PIL), la consellera ha señalado que "eso es el documento que se está aportando". "A todas las

personas que vienen les estamos diciendo que esto es una incorporación progresiva, que habrá una coexistencia con los programas actuales y que comenzaremos en Infantil con un programa que garantice una presencia importante del inglés para poder hacer la inmersión de manera progresiva y vamos a romper con las cosas que han funcionado bien", ha razonado.

La consellera se ha mostrado también dispuesta a negociar la catalogación lingüística de los puestos docentes en Secundaria. "Es una idea muy interesante y vamos a empezar a trabajarla", ha aseverado.

La consellera ha calificado de "muy positivo" el encuentro con Escola Valenciana, "como todos los que se están manteniendo con la comunidad educativa". En este sentido, ha hecho notar que son reuniones previas que pretende "consensuar con todos los agentes sociales" por lo que ha instado a esperar a conocer el contenido para hacer las "críticas pertinentes". "En definitiva, un mensaje: menos protestar y más aportar, que es la línea que tenemos que seguir en esta Conselleria", ha sentenciado.

Preguntada por si espera que el "clima de contestación social" puede afectar a estas conversaciones, ha subrayado "la voluntad de consensuar de la Conselleria" y ha agregado que, cuando su departamento explica lo que está haciendo, los agentes sociales se van "satisfechos y con voluntad de participa". "Insisto, primero hay que conocer las cosas para poder criticarlas, y al final es mucho mas interesante protestar menos y aportar más".

Por su parte, el presidente de Escola Valenciana, Vicent Moreno, también ha considerado "positiva" la reunión, así como el hecho de que en seis meses la entidad cívica haya sido recibida por dos consellers.

Moreno ha recalcado la "garantía" por parte de la administración de que "el tema de las líneas en valenciano está ahí y que se haga lo que se haga el sistema valenciano de inmersión se mantiene". "Los programas están ahí —ha proseguido— y hay que enriquecerlos con el inglés, algo en lo que estamos de acuerdo".

Sin cambios sustanciales

Este portavoz ha incidido en que, de cara a la próxima campaña de matriculación, "no va a haber ninguna cambio sustancial" y les han garantizado que "no van a cambiar el nombre de los programas y que compartirán eso con la incorporación progresiva del inglés".

"Nosotros nunca hemos estado en contra del plirilingüismo; lo que decimos es que las familias deben tener claro que comenzando la lectoescritura en valenciano se llega a todas las demás lenguas, no estaremos en contra si eso se mantiene y eso nos han dicho que está ahí", ha argumentado. La entidad también defiende que el inglés "se ha de introducir adecuadamente, con competencias lingüísticas del profesorado".

Finalmente, Moreno ha invitado a acudir "este año más que nunca" a las Trobades d'Escoles en Valencià, que tienen "un carácter lúdico y festivo pero también reivindicativo porque recuerdan a la administración que, en la enseñanza en valenciano, la oferta esta por debajo de la demanda".