El director general de Bienes Culturales, Francisco Giménez, ensalzó ayer el patrimonio imaginero murciano durante la presentación de las imágenes de los cuatro evangelistas que el escultor murciano José Antonio Hernández Navarro ha realizado para el trono de 'La Aparición', que procesiona en Murcia el domingo de Pascua.

Giménez alabó el trabajo realizado por Hernández Navarro y destacó la importancia del patrimonio imaginero de la Semana Santa murciana, a la que se refirió como una celebración "alegre y viva, solemne, pero no triste, porque todo el mundo sabe que la historia que se conmemora tiene un final feliz".

El estreno de los evangelistas se enmarca en los actos conmemorativos de la primera salida del paso en procesión, hace cien años, cuando la cofradía residía en la Iglesia de la Merced.

De esa fecha datan los once apóstoles, realizados por el escultor Francisco Sánchez Araciel, mientras que el Cristo fue tallado por Hernández Navarro en 1994, en sustitución del original, que es de propiedad particular, según han informado fuentes del Ejecutivo regional.

El trono, estrenado en 1998, es de Manuel Ángel Lorente, inspirado en el arte gótico, y será en las capillas de las esquinas donde luzcan, a partir del próximo Domingo de Resurrección, los evangelistas San Mateo, San Marcos, San Lucas y San Juan, modelados por Hernández Navarro y fundidos en bronce por Amando López Gullón.

Los cuatro evangelistas han quedado expuestos en el Pabellón Contraste del Museo de Bellas Artes, donde podrán ser visitados hasta el próximo Domingo de Ramos, día 1 de abril.