La Oficina de Presentaciones de Valencia ha localizado en un año —desde el 17 febrero de 2011 hasta el pasado día 29 del mismo mes del presente ejercicio— a un total de 537 personas buscadas por la Justicia. Esta entidad se encarga del control de las personas obligadas por resolución judicial a presentarse periódicamente ante los juzgados para evitar el fraude en esas presentaciones y conocer cuáles son sus causas pendientes.

Así lo ha indicado este lunes el juez decano de Valencia, Pedro Viguer, en declaraciones a los medios de comunicación, momentos antes de reunirse con su homóloga en Barcelona, María Josep Feliu, para enseñarle las instalaciones y comentarle las ventajas de esta oficina.

Desde el 17 de febrero —cuando se puso en marcha— hasta la actualidad, se han contabilizado 32.282 presentaciones, con una media de entre 2.500 y 2.700 cada mes. Del total —las 32.282 presentaciones—, a 537 personas les constaba un requerimiento judicial, y a 6.441 diferentes actuaciones policiales.

Respecto al ámbito judicial, de las 537 personas, 440 tenían un requerimiento de averiguación de domicilio; 82 de detención y personación; y 15 de detención e ingreso en prisión.

En cuanto a las medidas policiales, de las 6.441 personas, 4.272 tenían una orden de control específico —por malos tratos u órdenes de alejamiento, entre otras—; 2.124 tenían prohibición de salida; 24 tenían una prohibición de entrada; y a 21 les constaba la retirada de la tarjeta de extranjería, extradición u otros.

Recuperar una medida cautelar

Pedro Viguer ha resaltado el "buen funcionamiento" de esta oficina que ha servido, sobre todo, para "recuperar una medida cautelar que había perdido gran parte de su sentido, porque antes de la misma no había posibilidad de efectuar un buen control y actuar en plena colaboración con la Policía", ha dicho.

El juez decano ha señalado que hay otras ciudades interesadas en implantar este sistema, como Castilla la Mancha, mientras que esta oficina ya se ha implantado o está en fase de hacerlo en otras localidades como Barcelona, Castellón, Albacete, Toledo, Granada, Tenerife y hace escasamente unos días Sevilla.

Al respecto, ha destacado que "difícilmente se puede ofrecer más por menos", ya que esta oficina requiere una infraestructura mínima: un funcionario de Policía, un ordenador conectado a la base de datos de la Policía, y una dependencia en la Ciudad de la Justicia anexa al juzgado de guardia. "Es una filosofía que encaja muy bien con la actual situación económica. Con infraestructura mínima hemos conseguido un gran resultado", ha resaltado.

Por su parte, Feliu ha afirmado que el objetivo es trasladar este modelo de oficina a Barcelona, aunque "habrá que dimensionarla porque allí las presentaciones serán el doble —hay más población—". Al respecto, ha puntualizado que en Barcelona cuentan con una Oficina de Presentaciones, pero está gestionada únicamente por funcionarios judiciales, con lo que la efectividad es "mínima". Así, la pretensión ahora es copiar el modelo de Valencia.