El PSIB ha alertado este viernes del "peligro" que puede ocasionar la carencia de veterinarios para el control y la seguridad de enfermedades en las explotaciones ganaderas al considerar que estos recortes pueden crear un problema de salud animal.

En rueda de prensa el diputado socialista Cosme Bonet ha señalado que los recortes que se aplican desde la Conselleria de Agricultura, que provocaron la no contratación de más de una cincuentena de veterinarios desde principios de año, hace que actualmente sólo sean 16 los profesionales encargados de los controles y las campañas de saneamiento.

El parlamentario ha considerado que esta carencia de recursos puede crear un problema de salud animal y de seguimiento de enfermedades, como la del virus Schmallenberg que la Unión Europea ya ha detectado en algunos países.

Bonet ha explicado que este virus fue detectado inicialmente en explotaciones ganaderas de Alemania en el pasado mes de noviembre y que ha sido reconocido oficialmente por la Comisión Europea. Además, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente pidió en febrero, en una reunión con las Comunidades Autónomas, establecer planes de vigilancia de esta enfermedad para garantizar la detección rápida del virus, si bien por el momento no se tiene constancia de su presencia.

Según Bonet, la reducción por parte del Govern de contratos a veterinarios para hacer controles sanitarios en las explotaciones ganaderas puede hacer imposible este plan de vigilancia y prevención. En este sentido, ha recordado que el Colegio de Veterinarios ya alertó de los recursos insuficientes para hacer estas tareas de control.

Por todo ello, el grupo presentará una proposición no de ley en el Parlament para instar al Govern a recuperar las contrataciones de veterinarios y garantizar los controles sanitarios y la seguridad alimentaria. Además, se pide a la Conselleria que presente un plan de vigilancia del virus Schmallenberg, dotado con medios humanos y económicos.