«Es más un hobby que una profesión. Nunca me lo he tomado como una profesión, aunque durante una época sí lo era», explica.

Y es que Charlie es ahora mánager de discjockeys y promotor de eventos musicales, actividad que desarrolla a través de su empresa Real Sound System ().

«Tenemos a 12 discjockeys internacionales en exclusiva que pinchan house», señala.

Los gustos musicales de Charlie pasan por el hard rock americano, que es lo que le gusta pinchar cuando le ofrecen algún proyecto en el que se involucra él como DJ.

"Empecé en 1982 por casualidad. Desde los 14 años colecciono discos –tengo unos 6.000–, y la primera vez que pinché fue en un local de Barcelona, Texaco, que era de unos amigos. Después pasé por El Liguero de Marta, de Mataró", explica Charlie.

Pero entonces, entre 1997 y 2000 decidió hacer un paréntesis y se fue a Estados Unidos, a Los Ángeles, donde trabajó en el sector de la moda, "en una empresa dedicada al vintage, a la segunda mano", aclara Charlie. "En Estados Unidos sólo pinché en ocasiones puntuales".

"Real Sound System la creé a mi vuelta de Los Ángeles, al recibir el encargo de producir el festival Spoko para la Fira", señala este DJ que en su currículum constan actuaciones por los cinco continentes, aunque su cénit, asegura, es haber pinchado en el Donington Festival, "el más importante del mundo de hard rock", que se celebra en Londres.

En la capital británica también ha actuado en el mítico Marquee de Leicester Square.

Para Charlie las claves para que un discjockey triunfe son: "No puedes hacer una sesión para ti, sino hacer que los otros se lo pasen bien. Tienes que mirar continuamente a la pista y observar la reacción de la gente para ir creando un crescendo. Tienes que procurar que la gente se quede con ganas de más. Es muy importante".

Próxima entrega

Maribel Ibarz. Actriz de café teatro.