Una multitudinaria manifestación con numerosas pancartas del sector educativo ha recorrido este sábado el centro de Valencia en contra de los recortes en los servicios públicos y en la que se ha pedido la dimisión del conseller de Hacienda, José Manuel Vela.

La marcha, que ha discurrido por la céntrica calle Colón y ha finalizado en la Alameda variando así el recorrido tradicional de las protestas en la ciudad de Valencia, ha estado encabezada por los representantes de los cinco sindicatos (UGT-PV,CCOO-PV, CSIF VALENCIA, IV y Cemsatse-Fses) que iniciaron en enero un calendario de movilizaciones contra el decreto-ley de ajustes del Gobierno valenciano.

Unas 250.000 personas han participado en la manifestación de Valencia, según los sindicatos, y 25.000, según fuentes de la Policía Local.

Numerosas pancartas alusivas a la educación pública han inundado la manifestación con carteles firmados por colegios e institutos públicos y la alusión al "tijeretazo" ha sido utilizada incluso para decorar diademas.

"Menos corrupción y más educación" y "No me puedo apretar el cinturón y bajarme los pantalones a la vez" son algunos de los lemas que han portado los manifestantes, algunos de ellos al grito de "el maestro luchando, también está enseñando".

Dos furgones de la Policía se han apostado en la sede de la Delegación del Gobierno mientras ha durado la marcha, que se ha desarrollado sin incidentes, en un tono festivo y con 16 grados de temperatura.

Al término, se ha leído un manifiesto en el que se ha criticado que se ahorren mil millones de euros "recortando salarios en educación y sanidad" y se ha aludido a la "respuesta dura y contundente" del sector público y los ciudadanos para obligar al Gobierno valenciano a rectificar el decreto-ley.

Los convocantes han expresado su solidaridad con las protestas del Instituto Luis Vives de Valencia y han asegurado que no son el enemigo sino el pueblo, al tiempo que han pedido la libertad sin cargos para todos los detenidos en los incidentes de los últimos días entre los estudiantes y la Policía.

Los alicantinos también se han echado de nuevo a la calle para protestar por las medidas de ajuste puestas en marcha por la Generalitat en el sector público, en una gran manifestación celebrada en la ciudad de Alicante y convocada por los sindicatos UGT, CCOO, CSIF, FSES e Intersindical.

Bajo el lema "No a les retallades en el serveis públics. Depuració de responsabilitats en el Consell" ("No a los recortes en los servicios públicos. Depuración de responsabilidades en el Consell"), la marcha contó con la participación de representantes de los sindicatos convocantes, además del PSPV-PSOE, de Esquerra Unida (EU) y de Compromís, entre otras formaciones políticas.

Los sindicatos estimaron en más de 60.000 el número de asistentes, mientras que fuentes de la Policía Nacional bajaron esa cifra a 30.000.

El acto ha congregado a personal de todos los sectores públicos de la provincia de Alicante, como los bomberos y profesionales sanitarios, así como a miembros de plataformas estudiantiles, de dependientes y de otros colectivos sociales.

Los manifestantes, que hicieron sonar silbatos, pitos e instrumentos de percusión en un ambiente festivo, han coreado consignas como "Fabra, escucha, el pueblo está en la lucha", "No hay pan para tantos chorizos", "Más libertad y menos corrupción" y "Ésta es la cueva Alí Babá".

Durante el acto, se ha hecho alusión a la corrupción y a la huelga general.

La manifestación, que se ha iniciado en la estación de Renfe, en la avenida de Salamanca, ha discurrido por las dos principales arterias de la capital alicantina: la avenida de Alfonso X El Sabio y la Rambla Méndez Núñez.

Al final de esta última vía, colindante al paseo de la Explanada de España, se había instalado un escenario donde dos alumnas del Instituto Figueras Pacheco han leído un manifiesto de los sindicatos convocantes, alternando el castellano y el valenciano.

El manifiesto recuerda que la Generalitat "aprobó el pasado día 5 de enero un gran paquete de medidas de recortes(...) que supone una nueva agresión en el personal del sector público y a los servicios que se prestan".

Afirma que esto es "el mayor ataque de la historia" y que "ninguna otra comunidad" ha aplicado esa medida con "este alcance", por lo cual, según las centrales sindicales, "sólo" queda "contestar de forma contundente y conjunta a esta nueva agresión".

"Pretenden ahorrar más de 1.000 millones de euros de la forma más fácil, recortando salarios y servicios", según el manifiesto, que señala que la Generalitat "ha allanado el camino para despedir hasta un 25 % del personal interino de los diferentes sectores", lo que "puede afectar a miles de personas, aumentar las cifras de paro y deteriorar más" la prestación de los servicios públicos.

Una multitudinaria manifestación convocada por los sindicatos ELA y LAB y una veintena de organizaciones sociales y sindicales ha recorrido este sábado por la tarde las calles de Bilbao en protesta contra los recortes sociales y la reforma laboral, y en defensa de los derechos laborales.

La manifestación, que según sus organizadores ha congregado a más de 20.000 personas y entre 14.000 y 15.000 según la Policía Municipal, ha partido sobre las 18.00 horas desde la plaza del Sagrado Corazón tras una pancarta en la que se podía leer "Mugi gaitezen geure eskubideen alde (Movilicémonos por nuestros derechos). Recortes +pobreza -derechos".

Una hora después la cabecera de la marcha llegaba hasta el Teatro Arriaga, lugar donde ha finalizado y donde representantes de los convocantes han tomado la palabra para decir "basta ya" y apelar a la movilización social.

A lo largo de la manifestación se han coreado diversos lemas en contra tanto de los recortes llevados a cabo por los Gobierno central y vasco y también a favor de la huelga general convocada por los sindicatos nacionalistas para el 29 de marzo en la Comunidad Autónoma Vasca y en Navarra en protesta por reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy.