La Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología del Gobierno vasco y la Federación Vasca de Montaña han advertido del riesgo de que puedan producirse pequeños aludes de nieve por encima de los 1.000 metros de altitud y en zonas nevadas de fuerte pendiente.

Por encima de esta altitud, la cantidad de nieve acumulada es considerable. Además, el hecho de que parte de las nevadas hayan estado acompañadas de viento, ha originado que la capa acumulada de nieve sea muy desigual en las diferentes zonas.

Esta circunstancia, unida al actual ascenso de las temperaturas, hace que aumente el riesgo de que puedan originarse fracturas de las placas de nieve acumuladas y aumentar, por tanto, la posibilidad de que se produzcan pequeños aludes.

Ambos organismos han llamado a la prudencia, al tiempo que han recomendado evitar las zonas nevadas de fuerte pendiente situadas por encima de los 1.000 metros de altitud.