Artesanos Camiseros de España entra en suspensión de pagos con un pasivo de 2,1 millones de euros

Artesanos Camiseros de España ha entrado en concurso voluntario de acreedores, antigua suspensión de pagos, con un pasivo de 2,1 millones de euros, frente a activos valorados en 1,4 millones de euros, según informaron a Europa Press en fuentes jurídicas.

Artesanos Camiseros de España ha entrado en concurso voluntario de acreedores, antigua suspensión de pagos, con un pasivo de 2,1 millones de euros, frente a activos valorados en 1,4 millones de euros, según informaron a Europa Press en fuentes jurídicas.

Esta sociedad, filial del grupo textil Artesanos Camiseros (también en concurso), se dedica a la comercialización de productos textiles y de complementos de vestir suministrados por su matriz y al desarrollo e implantación del sistema de franquicia.

El Juzgado de lo Mercantil número 5 de Madrid ha designado administrador concursal a KPMG Abogados y ha abierto un plazo de 15 días para que los acreedores comuniquen sus créditos, según consta en el Boletín Oficial del Estado de este jueves.

Este procedimiento concursal se suma al que sigue el mismo juzgado para el grupo Artesanos Camiseros, que se declaró en concurso el pasado mes de mayo, con un pasivo de 9,92 millones de euros, que duplicaba el valor de 4,6 millones de sus activos.

La compañía especializada en camisería a medida presentó concurso meses después de acogerse al artículo 5.3 de la Ley Concursal, que concede un plazo de hasta cuatro meses para negociar un plan de pagos y alcanzar un acuerdo con los acreedores que evite declararse insolvente.

Según informaron entonces a Europa Press en fuentes de la compañía, la cadena estaba diseñando un plan de viabilidad que recogía medidas para recortar gastos, como un expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción de contratos.

En este sentido, alcanzó un acuerdo con los sindicatos para aplicar un ERE que afectaría a 45 de los 105 trabajadores de la factoría de Manzanares (Ciudad Real).

El plan de viabilidad de la empresa recogía asimismo medidas para potenciar las ventas, con nuevas aperturas en mercados como Alemania, Holanda e Inglaterra.

La cadena cuenta con una red de alrededor de 200 puntos de venta (incluyendo franquicias) y tiene presencia en una veintena de países. Las camisas son fabricadas en las instalaciones industriales que la compañía tiene Castilla-La Mancha.

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