El Ayuntamiento de Santander prevé ampliar su plan de austeridad y contención del gasto con la fusión de dos de sus sociedades públicas, Palacio de la Magdalena y Santurban, con el objetivo de optimizar recursos propios y evitar duplicidad en alguno de sus cometidos.

Así lo ha anunciado este miércoles el alcalde, Íñigo de la Serna, quien ha señalado que esta medida se enmarca dentro de las acciones de contención del gasto y austeridad que el Ayuntamiento viene implantando desde el año 2008, a las que se han ido incorporando progresivamente nuevas acciones que vienen a reforzar esta línea de actuación.

"En un ejercicio de coherencia y responsabilidad con la difícil coyuntura económica que estamos atravesando, el Ayuntamiento lleva ya cuatro años ajustando sus gastos en todo lo posible, adoptando medidas de austeridad y buscando la optimización de los recursos disponibles, manteniendo siempre la calidad de los servicios que se prestan a los ciudadanos", afirma el alcalde en un comunicado de prensa.

De la Serna explica que ahora se trata de "dar un paso más" en esos ajustes, planteando una nueva medida que pueda contribuir a conseguir un ahorro en los gastos de funcionamiento de las sociedades públicas. Por ello, está previsto que el equipo de Gobierno lleve a un Pleno de la Corporación el acuerdo de fusión de las sociedades Palacio de La Magdalena y Santurban.

Para llevar a cabo la fusión, es necesario una serie de trámites administrativos, que está previsto que duren unos meses hasta que se pueda materializar el proceso.

De la Serna remarcó que ya se han aplicado recortes en el presupuesto actual de ambas sociedades y, en este sentido, indicó que la Empresa Municipal Palacio de La Magdalena ha rebajado su presupuesto para 2012 en un cinco por ciento, "a pesar de que este año sea precisamente el de la conmemoración del centenario de la entrega del palacio a Alfonso XIII".

En cuanto a Santurban, el Ayuntamiento explica que esta sociedad puso en marcha en septiembre una serie de acciones tanto de ahorro como de contención del gasto que afectó a los capítulos de personal, explotación y financiero, "reduciendo el gasto en un 20% de media, pero sin suponer un detrimento de la cantidad ni calidad de los servicios ofertados para el municipio y sus ciudadanos".

Medidas de austeridad

El alcalde citó, entre las últimas medidas de austeridad y recorte del gasto -adoptadas en 2011-, la reducción del 30% del personal eventual; la reducción en más del 50% del número de comisiones informativas y la disminución de los concejales del equipo de Gobierno con dedicación exclusiva (13 en lugar de los 14 de la anterior legislatura), a pesar de haber pasado de 15 a 18 concejales.

Además, se ha establecido la subasta electrónica para la compra de combustible de los autobuses municipales y en julio de 2011 se hizo un ajuste del presupuesto por valor de 9,9 millones de euros.

Por otra parte, en 2010 se redujo el sueldo del alcalde en un 15%, "cinco puntos por encima del 10% que le hubiera correspondido siguiendo los criterios de la FEMP", en un siete por ciento el de los concejales y asesores, el nuevo por ciento el de los directores generales y el cinco por ciento los auxiliares de los grupos políticos municipales. Los sueldos estaban congelados, por lo que la cuantía sobre la que se aplicó esta reducción era la misma que en 2008.

Además, desde 2010 no se prorroga ningún contrato en vigor y se revisan a la baja, con un recorte mínimo promedio del 10% sobre los precios vigentes. También descendió en un 30% del número de vehículos oficiales a disposición de los 27 miembros de la Corporación, que, en la actualidad, son cuatro coches; y se redujo el número de vehículos asignados a servicios generales. Al igual que en 2011, en 2010 se realizó un ajuste presupuestario que, según el equipo de Gobierno, supuso el ahorro de 10 millones de euros.

En el año 2009 se redujo en un 30% la partida dedicada a protocolo y, desde entonces, con el fin de contener el gasto de personal y la oferta de empleo público, no se han convocado nuevas plazas, salvo las necesarias en los servicios de seguridad ciudadana.

Estas medidas se complementan con otras de eficiencia energética, como la optimización de los equipos informáticos y el apagado automático de los ordenadores a partir de las 22 horas, con lo que se ha conseguido un ahorro energético de 48.000 kilovatios al mes.

Asimismo, el Ayuntamiento implantó tecnología LED en todos los semáforos de la ciudad y en el alumbrado navideño, con un ahorro del 73% en el consumo de energía; y desde el año 2008, el alumbrado navideño se colocó durante menos días y se redujo el número de horas en las que las luces estaban encendidas.

La utilización de perlizadores y otros sistemas de ahorro de agua, la instalación de lámparas de bajo consumo en los edificios municipales, el fomento de la utilización del correo electrónico, en detrimento del consumo abusivo de papel y de otro tipo de consumibles; y el uso generalizado de papel reciclado son otras acciones de ahorro que llevan varios años implantadas en el Ayuntamiento de Santander.