La consejera de Hacienda de la Junta de Castilla y León, Pilar del Olmo, ha señalado que el Gobierno regional sólo se replanteará dar marcha atrás en la aplicación del 'céntimo sanitario', con lo que se gravará 4,8 céntimos por cada litro de combustible, si se detecta una caída de la recaudación, un punto en el que ha recordado la puesta en marcha de un Observatorio de ventas para orientar sobre la evolución del consumo.

Tras mantener una reunión con los portavoces de los tres grupos parlamentarios para avanzar en la negociación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria, Del Olmo ha insistido en que existen antecedentes históricos en los que no se evidencia un descenso del consumo de combustible a pesar de los datos aportados por Cecale y PSOE sobre posibles pérdidas.

"Vamos a ver como evoluciona", ha reiterado la consejera, quien ha garantizado que si se registrara un descenso de las ventas se "replantearía" su implantación, tras lo que ha destacado que Castilla y León ofrece ventajas para repostar por su extensión que alcanza los 94.000 metros cuadrados y porque el gasóleo es más barato que en Francia o Portugal.

De este modo ha insistido en que este tipo de medidas se pueden "revertir" en el momento que el Gobierno considere, aunque ha advertido que mientras se mantenga la presión derivada de la recesión económica es "muy difícil" salvo que se demostrara que "cae la recaudación".

En este punto ha recordado que en la negociación con los transportistas se acordó la puesta en marcha de un Observatorio que analizaría la evolución de las ventas de carburante desde la puesta en marcha del 'céntimo sanitario'.

Por otra parte, ha recordado que otras comunidades autónomas como La Rioja, Navarra o Aragón estudian la puesta en marcha de este tributo, aunque, como ha avanzado, esperan a conocer el "recorte" de las entregas a cuentas del Gobierno para adoptar decisiones.