Delegados de los Comités de Empresa de las siete consejerías y de la Junta de Personal de la Administración regional se han encerrado en las cinco delegaciones que la Junta tiene en las capitales de provincia de Castilla-La Mancha para debatir si llevan a cabo más acciones —aparte de la manifestación que tendrá lugar este sábado y la huelga que han convocado para el 29 de febrero— contra las medidas "impuestas" por el Ejecutivo de María Dolores de Cospedal.

Así lo han puesto de manifiesto en declaraciones a los medios en Toledo tanto la responsable del sector autonómico de UGT en Castilla-La Mancha, Beatriz Tormo, como el secretario del Comité de Sanidad y Asuntos Sociales de Servicios Periféricos de CCOO, Santiago Calatrava, quienes han hecho un llamamiento a la ciudadanía para que acudan a la manifestación del sábado y "sean conscientes de lo que está pasando".

"Estamos aquí para mostrar nuestras inquietudes y apoyo a aquellas personas que están intentando evitar, en plataformas o individualmente, el desmantelamiento de los servicios sociales que protegen a todos los ciudadanos de esta comunidad, que no son gratuitos porque los pagamos con nuestros impuestos y que el Gobierno pretende convertir en negocios privados", ha señalado Calatrava.