El Ayuntamiento de Granada y la empresa adjudicataria de las obras de remodelación de algunas calles del barrio de la Paz, en la zona Norte, han decidido paralizar los trabajos después de que el miércoles los operarios fueran "coaccionados y amenazados" por algunos vecinos que reclaman ser contratados, lo que hizo a los obreros temer por su seguridad.

Así lo ha informado en rueda de prensa la concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Granada, Isabel Nieto (PP), quien ha explicado que estas "amenazas" se produjeron por primera vez el 24 de enero, cuando el Consistorio recibió una comunicación de la empresa adjudicataria informando de las dificultades para emprender las obras ante las "coacciones" vecinales.

La empresa remitió al Consistorio, que así se lo solicitó, un informe detallado del personal con el que contaba para la obra y explicando que no resultaba factible despedirles e indemnizarles para contratar a alguno de estos vecinos desempleados.

Así las cosas, este miércoles 1 de febrero se desplazó al lugar de las obras una decena de vecinos "encabezado por el presidente de la asociación", según asegura la edil, que instaron a los operarios a paralizarlas "si no querían tener problemas", transmitiéndoles su intención de volver en unas horas con más gente.

Los obreros decidieron poner en aviso a la Policía Local de Granada, que una vez allí les aconsejó que se marcharan para "evitar problemas o agresiones".

"Por tanto, las obras del barrio de la Paz siguen sin poder comenzar a la espera de que la asociación de vecinos dé luz verde" para que puedan proseguir "garantizando la seguridad de los trabajadores", ha señalado la edil, que asegura entender la "desesperación" de estos ciudadanos ante la falta de empleo aunque no comparta los métodos utilizados.

De hecho, Nieto ha vuelto a reclamar este jueves que se modifique la normativa vigente para que los ayuntamientos puedan dar más puntos en los concursos públicos a las empresas que contraten a desempleados de la ciudad, ya que por el momento no es posible.