La alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, ha instado este lunes al portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento, Santiago Martínez Argüelles, a que no interfiera en las negociaciones con la organización de la Semana Negra y ha incidido en que no puede ser un evento de "tanta singularidad" como para no poder adaptarse a un recinto ferial tan amplio.

Así lo ha indicado antes de la visita al centro de formación de USO, en la que ha estado acompañada por el secretario general, Francisco Baragaño, respecto de las declaraciones de Argüelles en las que aseguraba que era intención de Foro el acabar con la Semana Negra y echar la culpa a los organizadores del evento. "No ponga en nuestra boca intenciones que no tenemos", le ha reprochado.

Moriyón le ha reiterado, asimismo, su petición de que no interfiera y, en el caso de que lo haga, le ha conminado a sea para sumar y para que el evento se quede en la ciudad "y no para revolver" la negociación.

Por otro lado, ha destacado que si bien el recinto ferial es privado, tiene bastantes espacios y pabellones y se habló ya con la Cámara de Comercio para ver si había disposición real de ayudar a mediar en el conflicto y buscar el mejor espacio. Según la regidora, ellos tienen interés y estarían encantados de tener allí la Semana Negra.

En este sentido, ha indicado que es cuestión de ponerse a trabajar las partes y buscar la zona más alejada para colocar los conciertos, los chiringuitos y la parte lúdica y cultural de forma que se pueda cumplir con la sentencia, que obliga a no celebrar el evento a menos de 500 metros del edificio 'Gacela', frente al estadio de El Molinón.

La alcaldesa ha hecho un llamamiento a la reflexión y a dar ideas en positivo. Ha recalcado, además, que en 24 años el evento tuvo nueve ubicaciones y dos de ellas acabaron en el juzgado, por lo que ha enfatizado que no puede ser que esté el mundo en contra de la Semana Negra. Ha incidido en que el ubicar el festival es una situación "compleja".