El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha justificado este viernes el retraso en la marcha de la concejal de Urbanismo, Carmela Silva —que dejará el Ayuntamiento para centrarse en su labor como secretaria de la Mesa del Congreso—, por las gestiones presupuestarias que el gobierno local aún tiene pendiente, y por la necesidad de contar con su voto en los plenos.

En declaraciones a los medios, el regidor ha confirmado que "Silva va a dejar su acta de concejal", pero ha precisado que lo hará "en el momento en que su marcha no produzca inconvenientes insuperables".

A ese respecto, ha explicado que el proceso de sustituir un concejal por otro puede llevar 2 meses, porque la toma de posesión se hace en un pleno extraordinario. Teniendo esto en cuenta, y también el hecho de que el gobierno municipal prevé presentar una modificación presupuestaria en el próximo pleno, el PSOE, que ya está en minoría en la Corporación, tendría un voto menos.

Además, y aplicando la misma lógica, Caballero ha señalado que no descarta presentar la próxima semana un borrador de presupuestos para 2012, con lo que se iniciaría el proceso de negociación con el BNG para lograr su apoyo y, una vez superado ese trámite, se llevaría a Pleno para su aprobación inicial. Si Silva dimitiese ahora, tampoco podría votar la aprobación de las cuentas y los socialistas tendrían 10 concejales en el pleno, en vez de 11.

Por otra parte, el alcalde de Vigo ha rechazado "enfoques retorcidos" de esta circunstancia, en referencia a un posible pulso con la dirección del PSdeG. "No busquen interpretaciones malévolas, que las cosas no van por ahí", ha espetado a los periodistas.