Los cielos continuarán despejados y las temperaturas permanecerán estables en la Península hasta el próximo miércoles, cuando la entrada de una borrasca dejará precipitaciones débiles y un descenso de los valores máximos, según ha explicado a Europa Press el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Ángel Rivera.

En este sentido, Rivera ha señalado que, de cara a este fin de semana, sólo se esperan lluvias débiles en áreas del Cantábrico y Pirineos, mientras que la cota de nieve estará por encima de los 1.600-1.700 metros.

Mientras, las temperaturas experimentarán durante el fin de semana pocos cambios en general, con un descenso ligero a moderado en el norte del país, sobre todo en el caso de las máximas, y se prevén vientos flojos o moderados, excepto en el norte de Gerona, donde serán más fuertes.

En cualquier caso, la situación será anticiclónica durante la primera mitad de la semana, "con temperaturas parecidas a las de estos días", aunque Rivera ha especificado que las temperaturas máximas subirán "por encima de los valores normales de enero". Además, se producirán heladas débiles por la noche, sobre todo en el interior peninsular.

La situación cambiará el miércoles, cuando la entrada de un frente por Galicia —que atravesará la Península a lo largo del jueves— dejará precipitaciones y un descenso de las temperaturas máximas, así como un ascenso de los valores mínimos.

Rivera ha especificado que "existe la posibilidad de que después entre otra borrasca en la Península", que dejaría lluvias más intensas y un descenso de la cota de nieve a los 900 metros, pero ha señalado que esta situación "aún está por ver".

Deficit hidrico

Por último, desde el inicio del año hidrológico —1 de octubre— el balance se sitúa en los 177 litros por metro cuadrado, un 33 por ciento menos de lo que debería haber llovido. Por zonas, tienen superávit el norte de Cataluña, algunas zonas del valle y desembocadura del Ebro, así como algunos puntos entre Murcia y Alicante y pequeñas zonas del sistema central.

El mayor déficit está en Canarias y, en menor medida, en toda la mitad occidental de Castilla-La Mancha, la mitad oriental de Extremadura y norte de Andalucía, así como en zonas del norte de Castilla-La Mancha y Asturias.