"Que cada palo aguante su vela, que no se paguen los errores de mala gestión de otros. Nosotros no nos volvimos locos en el 'boom'", argumentó la consejera delegada de Bankinter María Dolores Dancausa en rueda de prensa, para después concretar que Bankinter aportó un 53% más al FGD en 2011, esto es, un total de 15 millones de euros.

"No es justo que los bancos que actuaron con prudencia y rigor paguen la mala gestión de otros que actuaron alegremente", incidió.

Dancausa reivindicó el papel de la banca como motor de la economía y lamentó el "mantra" extendido de que el crédito no fluye hacia familias y empresas, pues puede convertirse en una "barrera" para normalizar la concesión de préstamos. "Decir que la banca quiere dejar de dar crédito es decir que la banca va a cerrar, porque la única misión de la banca es dar crédito", sentenció sin ambages.

Así pues, reclamó generalizar entre las entidades, al asegurar que Bankinter ha contribuido a que el crédito y la inversión haya fluido pese a las continuas "continuas barreras".

Bankinter registró un beneficio neto de 181,2 millones de euros en 2011, lo que supone un aumento del 20,2% respecto al obtenido en el ejercicio anterior, lo que evidencia, según la entidad, la rentabilidad del negocio y la solidez de su estrategia en un entorno difícil.

El banco ha afirmado que podría haber logrado un beneficio "considerablemente superior", si bien ha optado por reforzar las provisiones para activos adjudicados en anticipación a nuevas exigencias regulatorias que se puedan producir en 2012. Así, la cobertura para suelo adjudicado se ha elevado a un 75%, informó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La entidad ha señalado además que la solvencia se ha reforzado de forma notable a lo largo del ejercicio, sobre todo tras la "exitosa" emisión de bonos subordinados en acciones. De esta forma, el ratio de capital principal del banco alcanzó al cierre del año el 9,36%.

Bankinter ha mantenido el índice de morosidad más reducido del sector, el 3,2%, frente al 2,87% de un año antes, y elevadas coberturas en los activos problemáticos.