Eguzki denuncia que se esté "jugando a la ruleta rusa" con la salud de los vecinos del radio de Garoña

El colectivo ecologista Eguzki ha denunciado que se esté "jugando a la ruleta rusa" con la seguridad y la salud de las personas que viven en el radio de acción de la central nuclear de Garoña, situada en el territorio de Burgos y a 60 kilómetros de Vitoria.
Central de Garoña
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EUROPA PRESS
Central de Garoña

El colectivo ecologista Eguzki ha denunciado que se esté "jugando a la ruleta rusa" con la seguridad y la salud de las personas que viven en el radio de acción de la central nuclear de Garoña, situada en el territorio de Burgos y a 60 kilómetros de Vitoria.

Eguzki se ha referido así, en un comunicado, a la posibilidad abierta por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, de prolongar la vida de Garoña hasta 2019.

El colectivo ha considerado que resulta "contradictorio" el comunicar que no se va a apostar por la proliferación de nuevas centrales nucleares y, al mismo tiempo, pretender prorrogar la vida de la "más antigua e insegura" central nuclear.

En este sentido, Eguzki ha señalado que, si no se apuesta por la construcción de nuevas centrales, "mucho menos se debe hacer por las que ya tienen 40 años", pues supone un riesgo "inasumible" para la población, aunque, "evidentemente, dan muchos réditos a sus propietarios".

"ruleta rusa"

La plataforma ecologista ha indicado que "no tiene sentido" dejar de valorar el coste social del riesgo que entraña Garoña para la población, puesto que "están jugando a la ruleta rusa" con la seguridad y la salud de las personas que viven en el radio de acción de la nuclear "para no enfrentarse a los poderes fácticos y a los dueños de la central".

Asimismo, ha afirmado que el Gobierno central "debe pensar" que el argumentario de la crisis y de su consulta al Consejo de Seguridad Nuclear "están por encima" del coste y la voluntad popular, que "de forma clara y contundente" se ha posicionado al respecto.

Eguzki ha apuntado que en la central de Garoña hay algunos elementos esenciales para la seguridad que son "extremadamente vulnerables". Así, pone como ejemplo las grietas en las penetraciones de la vasija del reactor, la corrosión intergranular en el barrilete, o la de los manguitos de las penetraciones de las barras de control, que han dado lugar a nuevas fisuras.

"Ante este intento de imposición al conjunto de la sociedad, es preciso contar con la firme oposición de todos, con pronunciamientos claros en todas las instituciones y con una movilización que haga respetar la voluntad popular", ha añadido el colectivo.

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