La Cámara de Comptos ha recomendado al Ayuntamiento de Berriozar "contener los gastos e intentar aumentar la capacidad de generar recursos, ante la situación de crisis actual", así como "adecuar las tarifas a los costes de los servicios, priorizar inversiones, revisar la política de subvenciones y conseguir la autofinanciación de los servicios no obligatorios".

Así se desprende del informe de fiscalización del Ayuntamiento de Berriozar correspondiente al ejercicio de 2010. El informe analiza la ejecución presupuestaria, la situación patrimonial, el cumplimiento de la legalidad, la situación financiera y el cumplimiento de las recomendaciones de anteriores fiscalizaciones.

Según los datos del informe, en el ejercicio de 2010 el Ayuntamiento de Berriozar gastó 9,2 millones e ingresó 8,9 millones. Los gastos disminuyeron un 31 por ciento en relación al ejercicio anterior, fundamentalmente debido al descenso de las inversiones. En cuanto a los ingresos, disminuyeron en un 8 por ciento por el descenso en la recaudación de impuestos y en las transferencias de capital.

Los capítulos de gasto más importantes son el personal (39%), inversiones (31%) y otros gastos corrientes (29%). En cuanto a los ingresos, el 53% procede de transferencias y el 42% de tributos.

El informe ha analizado la evolución de los gastos de funcionamiento del Ayuntamiento, concepto que incluye personal, bienes corrientes y transferencias corrientes. Dicho gasto aumentó desde los 4,9 millones de 2006 a los 6,5 de 2009. En 2010, sin embargo, se rompió la tendencia creciente, reduciéndolo a 6,2 millones.

El informe ha analizado la cuenta general del Ayuntamiento, que expresa la imagen fiel de ingresos y gastos, su situación patrimonial y el resultado de sus operaciones. En cuanto al cumplimiento de la legalidad, el informe señala que el Ayuntamiento de Berriozar cumple la normativa vigente en su gestión económico-financiera.

Por lo que se refiere a la situación financiera, el Consistorio tuvo en 2010 ahorro neto positivo, lo que supone que sus ingresos corrientes fueron superiores a los gastos de funcionamiento y la carga financiera. A finales de año la deuda a largo plazo era de 1,4 millones, lejos de su límite de endeudamiento.