Varios centenares de funcionarios de prisiones de Cataluña se han concentrado desde primera hora de la mañana de este miércoles ante los centros penitenciarios de la comunidad para protestar contra los recortes salariales y despidos planteados por el gobierno catalán, según han informado fuentes sindicales.

Este miércoles, una setentena de funcionarios han cortado desde al poco después de las 10.00 horas la calle Aragó con Girona, en Barcelona, ante la sede de la Dirección general de Servicios Penitenciarios. Para evitar colapsos circulatorios, la Guardia Urbana ha cortado la calle Girona con Consell de Cent para que los coches no subiesen por Aragó. Los manifestantes han gritado consignas pidiendo la dimisión de Ramon Parara, director general de Servicios Penitenciarios.

En la prisión de Quatre Camins (Barcelona), unos 200 funcionarios se han reunido hacia las 8.30 horas ante el centro para "informar" a los trabajadores sobre la situación entre el colectivo y dar "un toque de atención" a la Generalitat. Los concentrados han bloqueado los accesos a la cárcel, en La Roca del Vallès (Barcelona), según han informado fuentes sindicales, aunque en principio su intención no era la de cerrar las entradas, según ha señalado un portavoz de los concentrados.

Hacia mediodía los funcionarios han desbloqueado los accesos a la cárcel de Quatre Camins y el turno de mañana ha entrado en las instalaciones, según han informado fuentes de la Conselleria de Justicia. Según fuentes sindicales, se ha decidido desbloquear la entrada a la prisión tras la celebración de diversas asambleas y han animado a los funcionarios a desplazarse a Barcelona para protestar ante la sede de Servicios Penitenciarios.

La cárcel de Can Brians, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), también ha visto bloqueados durante una hora sus accesos con una asamblea en la que han participado más de 200 personas.

La protesta se inició el martes por la tarde cuando una decena de delegados sindicales de funcionarios de prisiones se encerraron en la sede de Dirección General de Servicios Penitenciarios de Barcelona para forzar a la administración a acercar posiciones en las negociaciones sobre los recortes planteados. Delegados de los cuatro sindicatos con representación en el sector -CSIF, CCOO, CATAC y UGT- decidieron permanecer en la décima planta del edificio, situado en la calle Aragó, tras interrumpirse la negociación que mantenían con miembros de la administración. Al final 13 representantes de los sindicatos con representación a la plantilla se quedaron a dormir dentro el edificio.

Por su parte, la "Asamblea de Movilizaciones de Prisiones" ha dado apoyo a los encierros de funcionarios en los centros penitenciarios y ha propuesto, en un comunicado, una "huelga de celo" a partir de este miércoles en el conjunto de las prisiones catalanas.

La negociación por los recortes y ajustes de personal en el sector de funcionarios de prisiones viene prolongándose desde hace semanas, y como medida de presión, a principios del pasado diciembre miembros del colectivo bloquearon los accesos a algunas prisiones catalanas, como la Modelo de Barcelona y la prisión de Ponent de Lleida. La Fiscalía de Barcelona y la de Lleida abrieron diligencias para investigar los bloqueos a las cárceles catalanas, al considerar que los manifestantes pudieron incurrir en delito.