La Audiencia Provincial ha absuelto a una mujer que había sido acusada por su madre de maltratar a su hija menor de edad, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia consultadas por Europa Press.

La Audiencia confirma de esta forma la sentencia del Juzgado de lo Penal número 2 de Lorca, que absolvió en su día a la acusada de un delito de malos tratos en el ámbito familiar, aunque la abuela de la menor presentó un recurso de apelación en tiempo y forma.

Los hechos se remontan a 2006, cuando la acusada y su pareja sentimental convivían con la hija de ambos, de ocho años de edad, en la vivienda familiar de Lorca; ocupando la casa contigua la madre de la acusada y abuela de la menor.

Los padres y abuela compartían las tareas de atención y cuidado hacia la menor, surgiendo con ese motivo frecuentes enfrentamientos, ya que la abuela consideraba que su hija era incapaz de atender a su hija, por causa de un trastorno mental, y que la viene haciendo objeto de malos tratos físicos y psíquicos.

Por ello, según recogen los hechos probados, la abuela intentaba hacer por ello a su nieta objeto de una protección especial; situación que la menor percibe, por lo que en ocasiones se refugia en ella cuando las relaciones con su madre son difíciles.

La sentencia considera probado que una noche en la que se encontraban los padres y la niña en el domicilio familiar, por causa que no ha quedado suficientemente acreditada, la madre reprendió a su hija menor, que decidió marcharse a la casa de su abuela.

Al tratar de impedírselo, la acusada se abalanzó sobre la menor, causándole lesiones consistentes en erosiones superficiales de 0,5 centímetros de ancho y tres centímetros de largo en pliegue axilar posterior izquierdo y pequeño hematoma de un centímetro en zona pélvica izquierda, que no requirieron tratamiento médico alguno posterior a la primera asistencia médica, y sin que conste acreditado que la acusada actuara con la intención de lesionar a su hija menor.

Por la cercanía entre las viviendas, la abuela escuchó desde su casa ruidos y gritos en la vivienda de su hija, por lo que acudió hasta el domicilio de la acusada, encontrando a la menor sobre la cama y envuelta en una colcha, con la cabeza tapada, y se la llevó a su casa, formulando al día siguiente denuncia contra su hija en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Lorca.