María José Campanario habló con el cabecilla de la trama de la pensiones fraudulentas poco antes de la prueba médica con la que supuestamente quería conseguir una paga para su madre.

En esta conversación el máximo responsable de la operación, Carlos Carretero, daba indicaciones de lo que debía tener en cuenta para ese día.

El sumario establece que Campanario y su marido, Jesulin de Ubrique, hablaron un día antes de la falsa revisión médica.

En esta conversación se advertía a Campanario de la conveniencia de que su madre se quedara en su casa de Castellón mientras duraba la prueba médica, de manera que nadie sospechara que la que pasaba la inspección médica era otra mujer, la madre de la compañera de Carretero.

La tramitación de la pensión de la madre de María José Camapanario es sólo una de las numerosas pensiones que se habrían obtenido por este caso por el que la Guardia Civil ha detenido a 28 personas y en el que también aparece relacionado un psiquiatra con consulta en Ubrique y otro médico, hermano de la abogada de un detenido.

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