El Gobierno vasco se ha mostrado dispuesto a negociar con los sindicatos la reducción del complemento de baja por enfermedad de los empleados públicos, y ha asegurado que "ni mucho menos" se plantea suprimir totalmente esta prestación. Aunque propone que la limitación del complemento se aplique con carácter "general", el Ejecutivo pretende "incidir" especialmente en las incapacidades temporales "dudosas".

El viceconsejero de Función Pública, Juan Carlos Ramos, ha explicado en una rueda de prensa las propuestas que el Ejecutivo ha trasladado este jueves a los sindicatos que representan a los cerca de 67.000 trabajadores de la Administración autonómica.

Este encuentro, del que se han ausentado ELA y LAB por su rechazo a los planes del Gobierno, se produce después de que el pasado 23 de noviembre, el gabinete de Patxi López presentara a los representantes de los funcionarios su plan para ahorrar cerca de cien millones de euros en 2012 en gastos de personal.

Entre las medidas propuestas entonces a los sindicatos, se encontraba la supresión de las primas por jubilación anticipada, la "revisión" de los complementos salariales por incapacidad transitoria por enfermedad común y la suspensión del contrato relevo. Las dos primeras propuestas se han mantenido en el encuentro de este jueves, mientras que el Gobierno ha decidido mantener en 2012 losa contratos relevo.

En el caso de los complementos por baja por enfermedad -que según Ramos cuestan al Gobierno unos 43 millones de euros al año—, el viceconsejero ha asegurado que "ni de lejos" se pretende suprimirlos totalmente.

Según ha explicado, el Ejecutivo está dispuesto a negociar con los sindicatos el alcance de la reducción de estas aportaciones, que en la actualidad garantizan el cobro del cien por cien del salario a los trabajadores que se encuentran en esta situación.

Ramos ha informado que la limitación de estos complementos que pretende impulsar el Ejecutivo tendría un carácter "general". No obstante, ha asegurado que se pretende "incidir" de forma especial en los casos de incapacidad temporal "dudosa" y en los que más "frecuentan" las bajas. "BONIFICACIONES"

El Gobierno espera complementar esta medida con "bonificaciones salariales" que permitan reducir el absentismo, aunque no ha concretado de qué forma podrían articularse estos complementos. Ramos ha subrayado la necesidad de reducir el "elevado" absentismo en la Administración autonómica, que ha cifrado en cerca de un seis por ciento.

En el caso de las primas por jubilación anticipada, que el gabinete de Patxi López quiere eliminar, ha informado de que éstas tienen un coste anual de unos 30 millones de euros para las arcas públicas. De igual manera, el Gobierno plantea eliminar la posibilidad de retrasar la jubilación una medida con la que podrían ahorrarse cerca de 15 millones de euros.

Críticas a ela y lab

La Mesa de la Función Pública volverá a reunirse el 22 de diciembre. Ramos ha apelado a la "responsabilidad" de ELA y LAB para que acudan a ese encuentro y ha calificado de "lamentable" el hecho de que estas organizaciones no hayan planteado al Gobierno una propuesta formal con sus planteamientos.

Respecto a la posibilidad de cerrar un acuerdo con UGT y CC.OO. sin la participación de ELA y LAB, ha manifestado que no contempla "otro escenario que no sea el de la participación de todos los sindicatos".

Ramos ha asegurado que con sus propuestas, el Gobierno no plantea "ajustes ni recortes", ya que serían decisiones que afectan únicamente a "expectativas de derecho". El viceconsejero ha pedido a los empleados públicos un "compromiso de solidaridad" y ha afirmado que el Ejecutivo está dispuesto a "blindar" el empleo de "todos" los trabajadores al servicio de la Administración, incluidos los interinos.

Por otra parte, ha recordado a los sindicatos de la Función Pública que "no podemos ser ajenos a la realidad y a la crisis económica actual".