La radiación solar en Asturias ha aumentado un 3,5 por ciento entre 2007 y 2010, superando así los registros de los últimos 40 años, según los datos recogidos por la Fundación Asturiana de la Energía (FAEN), que ha dispuesto once estaciones en puntos estratégicos de la región para medir este indicador.

El director de FAEN, Fermín Corte, ha dicho este miércoles durante la presentación en Oviedo de las mediciones extraídas en este estudio que, dado este incremento, "el aprovechamiento de la energía solar en Asturias es posible".

También ha asistido a la rueda de prensa el responsable de Energías Renovables, Indalecio González, que ha explicado que las mediciones extraídas de este estudio han servido para elaborar el mapa solar del Principado.

Este documento actualiza los datos históricos sobre radiación solar, referenciados únicamente en Oviedo, ya que la FAEN ha instalado a lo largo del periodo estudiado once estaciones para calcular los valores medios de radiación e irradicación solar.

En concreto, las estaciones han medido la radiación y la temperatura cada 20 minutos, lo que ha generado un millón de datos al año a partir de los cuales se ha elaborado un mapa en el que se diferencian cinco zonas climáticas en Asturias: la interior- central, la occidental- central en la costa, la oriental en la costa, la occidental interior y la oriental interior.

De estos datos se ha extraído que la radicación solar en Asturias "no es homogénea", ha explicado González, ya que, tomando Oviedo como punto de referencia, todas las zonas oscilan entre incrementos o disminuciones del 7 por ciento de los valores medios de la capital asturiana.

Así, Tineo ha registrado el mayor porcentaje de radicación solar, con un 7 por ciento por encima de los valores de Oviedo —3.500 vatios a la hora por metro cuadrado—, y Mieres, el menor, con siete puntos por debajo.

En general, ha añadido González, las zonas altas y las del occidente registran más radiación solar, mientras que las del litoral y las del oriente, obtienen los valores más bajos.

Este estudio y el mapa solar creado a raíz de él, posibilitará a los profesionales diseñar instalaciones solares con datos ajustados a la realidad, más acordes a las necesidades reales y, por tanto, permitirá optimizarlas y mejorar su rendimiento.