El grupo de trabajadoras de Acasa, la concesionaria municipal de asistencia y ayuda a domicilio de Jerez de la Frontera (Cádiz) que, junto con los líderes sindicales de UGT, CCOO y CGT, se encerró este martes en la sala de prensa del Ayuntamiento jerezano, ha pasado toda la noche en el interior de las dependencias municipales custodiadas por la Policía Local para reclamar el pago de sus dos últimas nóminas.

El gobierno local (PP) ha permitido finalmente a las empleadas quedarse en el interior del Consistorio, pese a que la Policía local les diera de plazo inicialmente hasta las 22,00 horas para que abandonaran las instalaciones. Además, hasta "última hora de la noche" no se les permitió que recibieran comida "por la ventana" de sus compañeras, las cuales se habían concentrado en el exterior del Ayuntamiento para apoyarlas.

En declaraciones a Europa Press, la presidenta del comité de empresa, Encarna Barrios, ha mostrado su "indignación" por el trato ofrecido por los agentes del 092, ya que, según asegura, "no nos han dejado ir al baño desde ayer por la mañana —por el martes— y estamos orinando en un cubo de fregona" pese a que los aseos están "a un metro" de la sala en la que permanecen encerradas.

Asimismo, Barrios ha criticado la presencia "excesiva" de efectivos policiales y ha defendido los derechos de la plantilla "para reclamar nuestro sueldo".