Según el sindicato, "el impago de las nóminas y la deuda, que, en algunos casos, mantienen las empresas de servicios con sus trabajadores, está desembocando en un aumento de la conflictividad laboral, lo cual ha conducido a planificar un calendario de huelgas y movilizaciones, con el objetivo de reclamar los salarios adeudados y el cumplimiento de los acuerdos".

En este sentido, ha resaltado que el "retraso de los pagos del Consell y Ayuntamientos está poniendo en peligro la continuidad de servicios básicos y de miles de puestos de trabajo". En este sentido, ha lamentado "la suspensión del Servicio de Ayuda a Domicilio de Benidorm, gestionado por la empresa ASER y que ha conllevado el despido de 50 trabajadoras".

CCOO señala que las empresas adjudicatarias de servicios públicos "repercuten la falta de liquidez sobre el eslabón más frágil, en lugar de reclamar a las administraciones públicas lo que les adeudan".

"Todo ello está provocando una situación insostenible porque se vulneran los derechos de los trabajadores al incumplir las empresas sus obligaciones salariales como forma de presión a las administraciones morosas", ha añadido.

El sindicato ha considerado, de este modo, que la "única salida de los trabajadores es la convocatoria de huelgas", como las previstas en el personal de limpieza Hospital General de Alicante y centros de salud Departamento 19, es decir en un total de 13 centros; en el CREAMA, En Ginssa Servicios Integrales, del Grupo Hormigones Martínez; en servicios de vigilancia en las administraciones públicas; en la recogida de basuras Ayuntamiento de Orihuela; y del personal de limpieza de Conselleria de Infraestructuras Alicante.