La Comisión Europea propuso hoy revisar la coordinación europea en materia de cobro y declaración del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) en la Unión Europea para hacerla más efectiva y transparente y lograr más ingresos sin elevar los tipos.

El Ejecutivo comunitario a grandes rasgos sugiere:

El sistema actual, diseñado hace 40 años y que, según Bruselas, ya no se adapta a las necesidades del mercado interno, exige a los Estados miembros un tipo mínimo de IVA del 15%, pero les deja libertad para imponer tasas superiores.

Las fuertes diferencias entre los regímenes de IVA nacionales dificultan además el cobro de este impuesto en operaciones transfronterizas y desalienta a potenciales socios comerciales, que en ocasiones consideran más sencillo entablar negociaciones con países no comunitarios.

El comisario europeo de Fiscalidad, Algirdas Semeta, consideró este martes en rueda de prensa que se necesitan "cambios fundamentales" en el sistema actual ya que "no responde a las necesidades de una economía moderna" y pone "obstáculos al mercado interno".

"Nuestras cifras muestran que reducir en un 10% las diferencias entre los procedimientos para el cobro del IVA entre Estados miembros incrementaría el comercio interno de la UE en hasta un 3,7%", señaló.

En este contexto, y en función de que los ingresos por IVA suponen más de un 20 % para los países de la UE, unos 783.000 millones de euros, la CE está decidida a llevar a cabo un proceso de mejora del sistema basado en el cobro en destino del impuesto.

En los últimos años, se estudió la idea de dar la vuelta al sistema y explorar el cobro en origen del IVA, pero Bruselas ha constatado que las reticencias políticas son demasiadas para que esta propuesta salga adelante.

La propuesta de hoy de la CE se basa en los resultados de una consulta de seis meses, iniciada en diciembre de 2010, a la que contribuyeron 1.700 interesados, y tiene como objetivo ofrecer un marco de trabajo para coordinar la mejora del sistema a escala europea en los próximos años