Los Equipos Contra el Crimen Organizado (ECOs) de la Guardia Civil han detenido o imputado delitos a 1.192 personas integrantes de 107 organizaciones criminales durante los años 2010 y 2011. Además, en las operaciones policiales llevadas a cabo se han intervenido 14,5 toneladas de hachís y 3,4 de cocaína.

Asimismo, los investigadores se incautaron de 11,5 kilos de heroína, 225.800 dosis de drogas de diseño, 73 armas de fuego y 388 vehículos y embarcaciones. También se intervino material informático, de telecomunicaciones, útiles para robos, chalecos antibalas, joyas y gran cantidad de objetos procedentes de actividades ilícitas.

Los ECOs de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y las secciones centrales de Delincuencia Organizada y Delincuencia del Automóvil de esta Unidad se han reunido en Málaga para celebrar unas jornadas de coordinación operativa y abordar las nuevas tipologías delictivas del crimen organizado asentado en España, sus modus operandi y la evolución criminal.

Durante estas jornadas, los grupos de la Guardia Civil dedicados a la lucha contra el crimen organizado, fiscales Anticorrupción, representantes de la Agencia Tributaria y enlaces policiales de otros países acreditados en España han intercambiado experiencias en la lucha contra el crimen organizado.

Los ECOs, dependientes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, se crearon en 2005 para mejorar la respuesta policial en la lucha contra la delincuencia organizada, caracterizada por su gran movilidad y por la interconexión de sus redes, abarcando un extenso abanico de tipologías delictivas.

La proliferación de estos grupos, cada vez más sofisticados y heterogéneos, requiere que en aquellos lugares donde la implantación de esta clase de criminalidad sea más relevante, se adopten novedosas medidas de actuación, según han informado.

Actualmente existen Equipos Contra el Crimen Organizado en Málaga, Alicante, Pontevedra, Barcelona, Canarias y Baleares, cubriendo cada uno de ellos el territorio de su comunidad autónoma, si bien, debido a la gran movilidad de estas organizaciones criminales, en ocasiones han de desplazarse a otras provincias o países para continuar con sus investigaciones.