CSIS.F, tras las medidas anunciadas por la presidenta regional, María Dolores Cospedal, ha anunciado que no descarta ninguna medida de presión "ante tan brutal agresión a los empleados públicos de Castilla-La Mancha".
En nota de prensa el sindicato ha considerado "inadmisible" que el cuerpo de funcionarios y laborales de la administración "vuelvan a convertirse en la diana de las medidas de austeridad anunciadas por la presidenta regional: nueva bajada salarial y aumento de la jornada laboral".
Los trabajadores no pueden seguir asumiendo nuevos esfuerzos en sus nóminas, pues la pérdida de poder adquisitivo se fija ya por encima del 45% en los últimos años, han alertado.
Es por ello que CSI.F ha recordado a la presidenta regional que los empleados públicos ya soportan un descenso en sus sueldos del 5% desde el año 2010 y una nueva congelación en el presente ejercicio, lo que significa un nuevo 12% de pérdida de poder adquisitivo. Las medidas anunciadas en el día de hoy producirán una nueva desviación acumulada por encima del 20% en los dos últimos años.
"Resulta sospechoso y muy preocupante, en primer lugar, que no se respeten los órganos de representación de los trabajadores y que los sindicatos tengan que enterarse de las medidas que afectan a los colectivos a los que representan por la prensa, sin siquiera dignarse a avanzarles el grueso o la filosofía de esas decisiones. Gobernar por decreto no es una opción cuando ni siquiera se ha convocado a los agentes sociales para debatir, o al menos informarles, de las intenciones del gobierno", han condenado.
Por otro lado, la eliminación de empleos públicos, traducido en la eliminación de interinos y la falta de ocupación de las vacantes que se van generando provocará el aumento del número de desempleados y la desconfianza de los ciudadanos en una administración que en lugar de crear empleo lo destruye, defienden desde CSI.F.
"Las conquistas laborales conseguidas hasta ahora en las Mesas de Negociación y producto del diálogo sereno entre políticos y centrales sindicales quedan en agua de borrajas por virtud de la decisión del gobierno de Castilla La Mancha", han condenado.
Es por ello que han exigido al Gobierno de Castilla-La Mancha que "predique con el ejemplo y que los altos cargos y miembros del ejecutivo sean los primeros en reducirse los sueldos, dejar de cobrar dietas y kilometrajes y renunciar a sus prebendas especiales, como viajes y comidas oficiales, o cobros por asistencias a órganos colegiados".
Asimismo, le han reclamado que dejen de usar tarjetas de crédito a cargo del erario público y la limitación de pagadores en virtud de diferentes obligaciones institucionales o partidarias, "que hace que muchos cargos públicos reciban más de un sueldo, en un claro y flagrante agravio comparativo e injusticia social cuando se piden sacrificios a los trabajadores y más de un millón y medio de familias no tienen ningún tipo de ingresos".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios