Las familias de Andalucía necesitarían 1.480 euros de media al mes para hacer frente a sus gastos básicos, tras sufrir un grave imprevisto que afecte a sus ingresos, mientras que, a nivel de España, las que estiman una necesidad económica mayor frente a este tipo de situaciones son las familias catalanas y madrileñas (en torno a 1.700 euros), mientras que las gallegas y las de la Rioja presentan el gasto medio más reducido (1.350 euros), según se desprende del estudio realizado por Mapfre Vida, que analiza la actitud de los españoles ante el seguro de Vida, entre otros aspectos.

En esta encuesta el ciudadano reconoce que su mayor preocupación es sufrir una invalidez, una enfermedad larga o perder el empleo y le inquieta también, en gran medida, tener pérdidas económicas importantes y el fallecimiento propio o de algún familiar. Además, en estos momentos, casi el 83 por ciento de las familias andaluzas no se considera bien protegido económicamente frente a un imprevisto grave, como puede ser el fallecimiento del cabeza de familia.

No obstante, el estudio de Mapfre concluye que los españoles, aun mostrando una gran preocupación hacia el futuro (más la mujer que el hombre), siguen siendo más optimistas ante la posibilidad de hacer frente a los imprevistos y menos ahorradores que los vecinos europeos. En Andalucía, actualmente más del 30 por ciento de los encuestados reconoce no estar tomando ninguna medida de ahorro frente a imprevistos graves ni tampoco para su futuro.

Entre las medidas mencionadas, el seguro de Vida-Riesgo es considerado por el 74,5 por ciento de los andaluces encuestados un complemento adecuado para las pensiones públicas de viudedad, orfandad e invalidez, y cuatro de cada diez considera una gran ventaja el apoyo económico que reporta. En España, teniendo en cuenta la pensión media, una situación de viudedad y orfandad puede representar una pérdida de cobertura económica del 55 por ciento para una familia media española con un hijo. Sin embargo, menos de la mitad de los encuestados tienen contratado un seguro de vida y casi la mitad de los que lo poseen lo tiene vinculado a una hipoteca o crédito bancario.

El estudio muestra, asimismo, que la mayoría de los ciudadanos con seguro de vida no conoce bien las coberturas del producto contratado y más del 70 por ciento no sabe, incluso, el capital que tiene asegurado.

Una amplia mayoría de la población contrataría un seguro de vida para tener cubierta a su familia, por tranquilidad y como previsión de futuro. Por otro lado, entre los motivos principales que argumentan los ciudadanos para no contratar un seguro de vida están la falta de dinero (46,4 por ciento) y la falta de necesidad, manifestada especialmente por los jóvenes que no tienen cargas familiares.

El estudio, dirigido por la consultora Villafañe & Asociados y realizado sobre una muestra representativa de la ciudadanía española, de entre 18 y 65 años no jubilados, presenta un nivel de fiabilidad superior al 95 por ciento.