Comprar piso hoy en día es misión imposible, o casi. Especialmente si se es joven. Los sueldos mileuristas han convertido en quimera el deseo de los jóvenes de ser propietarios de una casa.

Según el último boletín del Observatorio Joven de Vivienda del Consejo de la Juventud de España, los jóvenes españoles tienen que destinar más de la mitad de su sueldo, concretamente el 53,5%, para hacer frente al pago inicial de una hipoteca media.

Este informe, correspondiente al segundo trimestre de 2011, indica que casi la mitad de los jóvenes españoles no ha abandonado aún la casa de sus padres ya que la tasa de emancipación de la población joven en España se sitúa en el 45,4%.

Según el estudio, para comprar una vivienda, los jóvenes deberían cobrar cerca de 28.000 euros anuales, unos 2.350 euros mensuales. Sin embargo, en la actualidad la mayoría percibe un 78,2% menos de lo que debería desembolsar para hacer frente a este pago sin sobrepasar el umbral máximo de endeudamiento aceptado por las entidades financieras.

Por provincias, los jóvenes que más porcentaje de su sueldo tienen que destinar a la compra de la vivienda se encuentran en Vizcaya, Guipúzcoa, Barcelona, Baleares, Madrid, Cantabria y Málaga. Por debajo de la media se encuentra Lugo, Toledo, Lleida, Cáceres, Cuenca, Badajoz y Ciudad Real.

Teniendo en cuenta estos datos, los jóvenes pueden aspirar, en el caso de la compra, a una superficie máxima de 56,1 metros cuadrados. En el caso de alquilar un piso, pueden llegar a disfrutar de 44,5 metros cuadrados, para el que destinan de media 632,9 euros mensuales.

Ante esta situación, el Consejo de la Juventud de España reivindica políticas para mejorar la coordinación entre las comunidades autónomas y el Gobierno, una ley que garantice el acceso a la vivienda digna o un parque público en alquiler cuyo coste no supere por persona el 10 % de los ingresos anuales.

Asimismo, reclaman que se fomente el uso de la vivienda vacía, se controle el precio de suelo libre, así como el proceso de renta básica de emancipación, se movilice el suelo público para la construcción de vivienda pública y se apueste por la construcción sostenible.