El alcalde de Colmenar (Málaga), Antonio Fernández (PP), que ha destituido a sus socios de gobierno, tres concejales de IU y uno de Convergencia Andaluza (CA), ha afirmado "estar muy tranquilo", al tiempo que ha dejado claro que su intención es "seguir trabajando por el pueblo".

Fernández ha insistido en que la decisión tomada este pasado sábado de romper el tripartito, destituyendo a estos cuatro concejales —los ediles de IU Miguel Alastra, Pedro Rodríguez y José Molina y el de Convergencia Andaluza, Diego Martín—, se debe a "la falta de respeto que han mostrado y a la falta de lealtad al pacto", al que llegaron tras las elecciones municipales de mayo.

"Ahora mismo no sé lo que puede pasar porque no he hablado con ningún grupo político, pero ellos deben ser consecuentes con sus decisiones", según ha manifestado a Europa Press el regidor de Colmenar.

Ha hecho hincapié en que en el pacto de gobierno se establecía que no se podría desarrollar ninguna propuesta sin consenso y en el caso del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), motivo de esta última disputa, "mi propuesta era congelarlo, dada la importante deuda que tiene el Ayuntamiento", mientras que los concejales depuestos defendían una rebaja, pidiendo para ello la convocatoria de un pleno extraordinario sin contar con el regidor.

"No podemos permitirnos el lujo de bajar el IBI y dejar de ingresar esa cantidad ni estoy dispuesto a realizar recortes de personal para compensar esa posible rebaja", ha defendido el alcalde 'popular', quien ha reconocido que ahora la situación del equipo de gobierno "es delicada", pero "lo que no voy a entrar es en cuestiones de amenazas".

Asimismo, ha criticado que estos concejales no acudieran al pleno del sábado cuando fueron ellos los que el 27 de octubre pidieron la convocatoria de una sesión extraordinaria con el objeto, como ha explicado el hasta ahora edil de Economía, Pedro Rodríguez (IU), de "sacar adelante una rebaja del IBI", ya que "el año pasado tuvo una gran subida y estaba asfixiando a los vecinos", así como de revisar las condiciones de los empleados municipales.

Tras la ruptura de este pacto, Fernández gobierna en minoría con el único apoyo de la otra edil del PP, Rosa Brenes, mientras que en la oposición se encuentran cinco representantes del PSOE, que fue el partido que ganó las elecciones; tres de Izquierda Unida, y uno de Convergencia Andaluza.

La firma del pacto que dio la Alcaldía de Colmenar al representante del PP llevó a la Comisión Ejecutiva Provincial de IULV-CA a iniciar el expediente para suspender de militancia a sus tres concejales; sin embargo, como han indicado desde la dirección de la coalición, "los últimos acontecimientos pueden servir para que reconsideren su actitud y se paralice el proceso".