Un hombre de 71 años de edad de la localidad pontevedresa de Cangas do Morrazo se enfrenta a la petición de siete años prisión al ser acusado de abusar sexualmente de un menor con discapacidad.

Estos hechos, ocurridos en 2006, están siendo juzgados en la Audiencia de Pontevedra. El procesado ha negado haber mantenido ningún tipo de contacto sexual con el menor y ha basado su defensa en que, además de Parkinson, padece una disfunción eréctil grave desde hace 20 años, algo que ratifican informes médicos.

Sin embargo, el fiscal jefe de la Audiencia Provincial, Juan Carlos Aladro, ha sostenido que sí "hubo relaciones sexuales", aun sin penetración, y que, "aunque fueron consentidas por el menor, se dio una situación de engaño".

De hecho, ha incidido que el acusado "se valió de su superioridad para abusar del niño, que pasaba por delante de su casa para ir a jugar al tenis". Éste tiene en la actualidad 21 años de edad.

Los padres del joven han relatado que, por aquellas fechas, su hijo se volvió violento y llegó a pegarles. Por este motivo, el Juzgado de Menores decidió su internamiento en un centro, donde contó que había sido violado.