La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha puesto en marcha en Tariego de Cerrato (Palencia) las obras de construcción de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) en las que el Organismo de cuenca invertirá 206.232 euros.

Se trata, según informaron a Europa Press fuentes del organismo de cuenca, de un sistema de depuración de bajo coste a través de un sistema de filtros biológicos que permitirá que este municipio, de menos de 1.000 habitantes, pueda asumir los gastos de mantenimiento.

De este modo, según las mismas fuentes, se evitará que, como ha ocurrido en otras ocasiones, las infraestructuras "terminen abandonadas por no poder ser costeadas por los ayuntamientos, a los que corresponden las competencias de saneamiento y depuración".

La nueva EDAR de Tariego de Cerrato se está construyendo en la misma parcela que ocupaba la antigua estación depuradora, actualmente fuera de servicio, lo que permitirá utilizar para la nueva planta aquellos elementos que se encuentran en buen estado de conservación.

Tres tipos de tratamientos

El sistema de depuración que se está instalando en Tariego de Cerrato permitirá que las aguas procedentes de la localidad pasen por tres tipos de tratamientos diferentes hasta que, una vez depuradas, lleguen al río.

El tratamiento primario consiste en la construcción de un tanque Imhoff en el que se realizará la decantación y digestión de la materia orgánica del agua que entra a la planta; el biológico se centra en la eliminación de la materia orgánica que contiene el agua residual, para lo que se utilizará un filtro biológico.

El sistema de depuración consiste en un depósito relleno de material filtrante al cual se adhieren los microorganismos responsables de la depuración y, al circular el agua por el material de relleno, se degrada la materia orgánica.

El tercero consiste en el tratamiento de fangos ya que los fangos generados será retirados periódicamente para su tratamiento.

Se trata de una de las 14 depuradoras experimentales que se construyen en la cuenca del Duero para probar diferentes métodos de depuración en función a una serie de parámetros como la superficie necesaria para su instalación, el rendimiento, su integración paisajística, la generación y gestión de lodos o la climatología de la zona y que, en función de los resultados obtenidos, podrían instalarse en un futuro en otras localidades de características similares que no cuentan con sistemas depuración.