La Policía Nacional ha dado por desmantelados los clanes mafiosos que controlaban la noche madrileña dentro de un dispositivo mucho mayor iniciado en 2008 y que ha supuesto un duro golpe al crimen organizado en España.

En total, y según detalló este jueves Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, la investigación se ha saldado con la puesta a disposición judicial de 150 personas arrestadas en varias operaciones contra la venta de drogas y la extorsión en los locales de ocio nocturno en Madrid y otras provincias.

La detención de veintisiete de los arrestados, los pertenecientes al 'clan de los búlgaros', se conoció hace un mes, justo en la fase final del operativo. Este grupo se dedicaba al negocio de los porteros de discoteca. Mediante los mismos, la organización controlaba la distribución a pequeña escala de las cantidades de droga importadas de Sudamérica.

Otros 22 arrestados formaban parte del 'clan de los boxeadores', que se ocupaba de los ajustes de cuentas contra bandas rivales y al cobro de deudas por impagos en la venta de estupefacientes. También han caído miembros de los 'Miami' y los 'iraníes'.

Los 'búlgaros' y los 'boxeadores' trabajaban conjuntamente para proteger un lucrativo negocio de drogas en el que estaban implicados varios 'intocables', como les ha definido la Policía.

Entre ellos estaban Lauro S.S., que distribuidor de la droga; Ana María C., conocida como 'La reina del sur' por sus conexiones con el narcotráfico en América del Sur; Álvaro L.P., que ayudaba a introducir las sustancias en España; los hermanos Juárez S., que participaban en el transporte de los estupefacientes; o Ivo 'el búlgaro', supuesto líder de su clan.

Todos ellos conformaban una "maraña delictiva" que contaba con infraestructura empresarial  para blanquear el dinero. En total, les han sido intervenidos 27 millones de euros, cuentas bancarias y propiedades por importes millonarios.

La investigación comenzó hace tres años. En 2008,  una llamada telefónica intervenida en el marco de la 'Operación Guateque' desveló la existencia de una banda de ciudadanos búlgaros dedicada a controlar el tráfico de drogas en la noche madrileña.

La llamada llevó a la detención de Lauro S.S., propietario de diversos locales de ocio en Madrid y que fue acusado de distribuir la cocaína del mayor laboratorio de Europa, el desmantelado por la Policía Nacional en la 'Operación Colapso' en Villanueva de Perales. En esta intervención también fue apresada Ana María C.

La operación dio un paso adelante tras la muerte a tiros de Catalin Stefan 'Cata' y de otro portero a las puertas de la discoteca Heaven, en Madrid capital, en enero de 2009. La Policía barajó que el asesinato de 'Cata' pudo tener su origen en un ajuste de cuentas entre los 'Miami' y los' Rompecostillas'. Dos de los detenidos en la operación que ha llevado a la desarticulación del 'clan de los búlgaros' estarían relacionados con estas muertes.

La investigación de la Policía Nacional ha contado con la colaboración de la Agencia Tributaria, además del apoyo de las autoridades policiales y judiciales estadounidenses, colombianas y holandesas.

La organización dedicada al narcotráfico y a la extorsión que ha sido desarticuladamantuvo además contactos con empresarios para alquilar en exclusiva o comprar la terminal de carga del aeropuerto de Ciudad Real, con el objetivo de introducir droga desde Sudamérica y África.

Castro ha explicado que, en un momento dado de la investigación, se tuvo constancia de que miembros de la banda contactaron "con un empresario inmobiliario, cuya empresa cotiza en bolsa", quien a su vez contactó con un empresario relacionado con la aeronáutica y con un importante empleado de banca, y entre todos planearon "alquilar e incluso comprar, en exclusiva, la terminal de carga del aeropuerto de Ciudad Real".