La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha relegado este martes a CiU en el espacio electoral independentista para ofrecer el PP como la opción de aquellos simpatizantes de la federación que prefieran "la concordia, la unidad y el progreso" a la secesión.

Durante su intervención en un mitin en Tarragona junto al candidato de la provincia, Alejandro Fernández, ante más de 500 personas, ha asegurado que el voto de CiU es "inútil" y ha erigido a su partido como el garante de la recuperación económica y el empleo.

El PP confía en convertirse en la segunda fuerza más votada en la provincia de Tarragona por delante de CiU, obteniendo por primera vez un senador por elección directa y pisando los talones al PSC como partido más votado.

Para lograr ese objetivo, tanto Camacho como Fernández no han ahorrado críticas a socialistas y nacionalistas, a quienes han acusado de llevar a España "a la ruina" aprobando juntos en el Congreso la mayoría de las políticas económicas de la última legislatura, entre ellas el plan de ajuste de mayo de 2010.

Camacho ha asegurado que el 20 de noviembre las urnas deben convertirse en una moción de censura a las políticas del PSOE, y ha asegurado que los propios dirigentes del PSC "se avergüenzan" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y lo esconden en campaña.

"zascandilear y raposear"

En la misma línea, el candidato del PP por Tarragona, Alejandro Fernández, ha repartido críticas entre socialistas y nacionalistas, a los que ha acusado de ir al Congreso a "raposear y zascandilear -enredar y usar trampas y artimañas—".

El dirigente popular ha acusado al PSOE de promover la división entre españoles durante sus dos legislaturas al frente del Ejecutivo central, y ha asegurado con un hipotético Gobierno de Mariano Rajoy "ningún demócrata volverá a sentirse insultado".

En las generales de 2008, el PSC logró 4 diputados en Tarragona por 1 del PP, superando a los populares por más de 100.000 votos, unos resultados que los populares esperan voltear el 20 de noviembre logrando dos diputados y un senador de elección directa alzándose como segunda fuerza, muy cerca de los socialistas.