El centro de conservación de especies Bioparc Fuengirola se ha convertido en el parque de animales que más visitas recibe anualmente en Andalucía, habiendo registrado un aumento del 24 por ciento en el número de visitantes de junio a septiembre, con un total de 122.000 personas.

Bioparc Fuengirola, abierto en 2001, se consolida así como un producto turístico que ofrece "una oferta complementaria a nivel cultural y de entretenimiento de una alta calidad y realiza, al mismo tiempo, una labor social en cuanto a la conservación de especies en peligro de extinción, la educación de la población y la investigación".

Cerca de 300.000 visitantes acuden a Bioparc Fuengirola todos los años, siendo un alto porcentaje de ellos niños. En muchos casos, éste es el primer contacto y el más directo que tienen con la naturaleza. De esta forma, el parque actúa como un canal informativo que va a formar a los más pequeños como futuros conservacionistas, según han indicado en un comunicado desde este centro.

El parque trabaja en más de 40 programas europeos de reproducción en cautividad de especies amenazadas, albergando en sus instalaciones ejemplares como el tigre de Sumatra, el tapir malayo, el falso gavial malayo o el gorila de costa. Todas ellos están bajo programas coordinados desde la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA), a la que Bioparc Fuengirola pertenece como miembro activo.

Con este fin conservacionista, Bioparc Fuengirola y Bioparc Valencia crearon en 2007 la Fundación Bioparc, que juega un papel esencial en este sentido, ya que no sólo lleva a cabo programas de conservación de especies, sino que también realiza proyectos para preservar los bosques de África tropical y de sus especies vegetales.

El objetivo primordial de Bioparc Fuengirola es la conservación del medio natural y animal. Desde su concepción, fue pensado para albergar especies cuya reproducción fuese primordial y, por ello, trabaja bajo más de 40 programas europeos de reproducción ex situ.